- 500 g. de pan de hace 2-3 días
- Una cabeza de ajo
- 250 g. panceta
- Aceite
Comenzamos cortando el pan en rebanadas muy finitas. Le echamos un poco de agua, el suficiente para que se humedezca todo el pan, puesto que si las mojamos mucho luego se tardan más en preparar.
Echamos aceite en una sartén y le agregamos los dientes de ajo, sin pelar y con un corte a la mitad para que no salten. Cuando estén doraditos, los sacamos.
Agregamos la panceta cortada a tiras menudas. Dejamos freir y retiramos.
Incorporamos el pan en ese aceite y rehogamos a fuego medio hasta que estén doraditas.
Es entonces cuando añadimos los dientes de ajo y la panceta. Seguimos moviendo hasta que esté todo bien mezclado.
Se pueden acompañar con varias cosas, en nuestro caso nos gustan con bacalao salado y sardinas.
Probadlas, no os decepcionarán.