Qué ganas tenía yo de traeros una receta de Pavlovas.
Le di muchas vueltas a si os las hacía mini o grande como esta de Chocolate y Caramelo saldo o tipo layer, como esta Tarta Pavlovade Castañas que es una locura de rica.
Pero como no tenía ninguna mini, pues os ha tocado las Mini Pavlovas, jajajaja.
Y como relleno, he optado por una maravillosa crema de nata (crema de leche) y queso que es una delicia. Esta crema es apta, tanto para los que no les gusta la nata (crema de leche), porque no sabe a nata (crema de leche), como para los que no les gusta el queso porque tampoco sabe a queso, así que nadie tiene excusa para prepararla.
Poder traeros esta receta hoy me ha costado bastante, los que me seguís por IG y veis mis Stories sabéis que he estado de viaje por el País Vasco, lo hemos pasado de maravilla y hemos disfrutado muchísimo. Una tierra preciosa con gente muy amable y atenta.
Pero a lo que iba, quería haberme dejado el post hecho para publicarlo el lunes 31, pero fue una autentica locura con todos los preparativos, así que solo me dio tiempo a dejarme las mini pavlovas hechas, que no es poca cosa.
Asi que después de llegar a casa, deshacer maletas, poner mil lavadoras y sus consiguientes secadoras, doblar ropas (lo de planchar queda pospuesto hasta nueva orden) decidí aparta esta mañana para montar las pavlovas y fotografiarlas.
Había yo decidido levantarme temprano e ir a comprar los frutos rojos para la decoración.
¿Temprano?
¡Ja!
El viaje ha sido precioso pero agotador y desde que llegué no he podido recuperarme (se que suena a excusa y a abuela, pero es así )
Así que he abierto los ojos a las 9h con todo el sueño del mundo.
Eso ha hecho que bajara a comprar a las 10.30 o sea muy tarde si pretendes rellenar las mini pavlovas, hacer la sesión de fotos y preparar la comida, porque en esta casa les gusta comer todos los días.
He llegado a casa con los frutos rojos a las 12h, como las locas.
Pero como cuando los astros deciden confabularse contra ti, lo hacen con todas las de la ley, estaba yo apunto de preparar mi crema, al mismo tiempo que movía muebles para preparar la escena, no me digas como, pero ya sabes que las mujeres podemos hacer dos o tres cosas a la vez. Cuando me llama el técnico de la lavadora para decirme que llegaba en 10 minutos.
Una cosa es poder hacer la crema, mover los muebles y pensar en la escena, todo a la vez y además atender al técnico de la lavadora.
Eso iba a ser mucho hasta para superwoman.
Horror.
Pánico.
La lavadora ESTÁ en la cocina.
Tenia que rellenar las mini pavlovas, obviamente en la cocina, y las fotos como sabéis las hago en la cocina.
Me ha tentado preguntarle al señor técnico si no le importaba posar en las fotografías de fondo, ya que estábamos allí.
En fin, que hace poco más de una hora que las he rellenado y fotografiado,. Es por todo ello que estoy preparando el post a las 19h y que ¡¡como no corra no llego!!
¡Más recién hecho no os lo puedo traer!
Mis consideraciones:
Las pavlovas como los merengues podéis hacerlos con antelación y guardarlos en una caja o táper fuera de la nevera, aguantan bien un par de semanas, de hecho el problema es el polvo que puedan coger si no se las tapa bien, así que yo diría que aguantan más de un para de semana, pero no he podido comprobar este punto que nos la hemos comido antes.
No las metáis en la nevera porque empiezan a coger humedad y se deshacen.
Una vez rellenadas hay que consumirlas casi en el momento, por una hora o dos no pasa nada, pero casi es mejor montarlas en el momento de consumirlas.
Otra opción es congelarlas una vez montadas, pero os recomiendo que las sirváis, medio congeladas o no descongeladas del todo, porque sino el merengue de la pavlova se empezará a deshacer. Yo lo he hecho así alguna vez y es muy buena opción. De hecho de las dos que he montado, una se la tomarán de postre mi ni niña y mi marido esta noche y la otra esta congelada esperando una buena ocasión.
La receta de las mini Pavlovas es de Directo al Paladar.
INGREDIENTES:
Para las Mini Pavlovas:
4 claras naturales
250gr de azúcar glas
1 cucharadita de vinagre
1 cucharadita de maicena
1 cucharadita de extracto de vainilla
Para la crema de queso:
Para ver los ingredientes y la elaboración pincha en esta receta Tarta Guinnes . Te recomiendo que hagas media receta, tendrás suficiente.
Para la decoración:
Frutos rojos variados, como fresas, frambuesas y grosellas.
Unas hojitas de hierbabuena.
ELABORACIÓN:
De las Mini Pavlovas:
Para unas 5 ó 7 mini pavlovas de unos 10cm de diámetro.
Precalentamos el horno a 120 grados si utilizamos ventilador, sino es así pondremos 130 grados.
Dibujamos sobre papel de horno unos círculos de 10cm utilizando un vaso o similar, yo usé un ramenquín de ese tamaño.
Damos la vuelta al papel para evitar que la tinta se transfiera a las pavlovas.
En el bol de la batidora, el cual estará perfectamente libre de grasa, para ello, después de limpiarlo podemos pasar un papelito impregnado en limón o vinagre por el bol y por las varillas.
Ponemos a montar las claras y cuando espumen añadimos el vinagre y el azúcar glas en forma de lluvia, tenemos que montar las claras a punto de nieve, es decir que al levantar la varilla el merengue haga picos firmes.
Añadimos el extracto de vainilla, ten en cuenta que el extracto de vainilla dará un poco de color a las pavlovas, puedes usar incoloro si quieres. Yo usé el normal y aunque le dio algo de color no me importó.
En este punto añadimos la maicena también y batimos a velocidad baja un minuto más, justo para integrar.
En mi caso puse el merengue en un manga pastelera con la boquilla 1M de wilton, pero tu puedes usar la que más te guste, o simplemente ponerla a cucharadas y hacer un hueco en el centro.
Yo hice dos círculos superpuestos con la manga para darle más altura.
Hornea durante una hora y deja enfriar las pavlovas dentro del horno apagado, hasta que se enfríen totalmente, yo las dejé dormir toda la noche dentro del horno y a la mañana siguiente las saqué y las puse en una caja de cartón bien tapadas, hasta hoy, literalmente.
Ponemos un par de cucharadas de crema dentro de las pavlovas y decoramos con los frutos rojos.
Solo nos queda disfrutar de este delicado y fresco bocado.
Definitivamente son una delicia y un postre ideal para las noches y celebraciones de verano.
No dejéis de hacerla porque merecen mucho la pena.
Si tenéis alguna duda me la podéis dejar aquí o en mis redes FB o IG.
Como siempre os dejo con el verdadero pedacito de cielo:
“Todo el que encuentra Sabiduría, halla la vida y recibe el favor del Señor.”