Los molletes de Antequera son uno de mis panes favoritos. Me encanta su miga blandita y tostados, con aceite de oliva virgen extra son un desayuno perfecto. Los molletes tradicionales se hacen con harina, levadura, agua y sal. Por eso esta receta no añade ni grasas ni azúcar ni leche. La única modificación que me he permitido es añadir harina integral panadera, mezclada con la harina panadera, para incrementar el aporte de fibra sin modificar demasiado la textura y el sabor de los molletes.
Esta receta está inspirada en la que podéis encontrar en el blog de María Lunarillos. Sin duda es la que he encontrado más próxima a los molletes de Antequera originales. Requiere de una planificación mínima: el día antes a hornear los molletes se prepara el prefermento, que debe descansar toda la noche refrigerado.
Cuando los molletes se hornean y enfrían, puedes conservarlos fácilmente congelados, en una bolsa zip. Suelo hacerlos de entre 40 y 50 gr de masa. Es el tamaño perfecto para las tostadas del desayuno para mis hijos y para el bocadillo del colegio o la merienda. Si los congelas cortados longitudinalmente cuando vayas a utilizarlos para el colegio, rellénalos y envuélvelos. Cuando sea la hora del recreo, estarán como recién hechos.
Los ingredientes que necesitas son:
Para el prefermento:
100 gr de harina panadera integral;
120 gr de agua;
2 gr de levadura fresca.
Para la masa:
500 gr de harina panadera;
400 gr de agua;
de 5 a 10 gr de sal (según prefieras);
3 gr de levadura fresca.
1º. La víspera, disuelve la levadura en el agua y mézclala con la harina en un cuenco. Mueve bien hasta que no queden grumos y tapa el cuenco con un film transparente. Deja reposar durante dos horas y guarda en el frigorífico hasta el día siguiente.
2º. Al día siguiente, saca el prefermento al menos media hora antes de amasar los molletes.
3º. Deslía la levadura en el agua y añádesela a la harina, mezclada con la sal. Trabaja con las manos hasta obtener una bola lisa y uniforme o con tu Thermomix o Monsieur Cuisine Plus (velocidad espiga o botón de amasado durante un minuto y medio). Deja reposar la masa en un cuenco grande tapado con un film transparente hasta que la masa haya doblado su volumen.
4º. Corta trozos de masa de entre 50 y 100 gr cada uno (para los bocadillos de mis hijos los suelo hacer de entre 40 y 50 gr). Pon bastante harina en la superficie de trabajo y boléalas (dales forma de bola) y después alárgalas un poco o directamente déjalas redondas. Aplánalas con la mano, dales la vuelta y vuelve a aplanarlas. Cúbrelas con un paño limpio y seco y deja que leven una hora en un lugar cálido, sin corrientes de aire.
5º. Precalienta el horno a 200º y baja a 180 cuando vayas a meter los molletes. Hornea durante 12 minutos (si son pequeños) o 15 minutos (si has optado por los de 100 gr) y deja enfriar en una rejilla.
Calentitos, con un buen aceite de oliva virgen extra están deliciosos. Si nunca has hecho pan, anímate con esta receta. Por muy poco dinero tendrás pan para muchos días y lo más importante, hecho en casa, del tamaño y con la harina que tú quieras ponerle. Yo suelo comprar mis harinas “on lime” en El amasadero, una tienda de Málaga (Alhaurín el Grande) que sirve a toda España. La levadura fresca es fácil de encontrar en supermercados. La verás en cubitos, refrigerada al lado de las mantequillas. Puedes congelar la que te sobre para utilizarla en otro momento. Como ves, no tienes excusa para probar estos molletes de Antequera integrales. Anímate y cuéntame qué te han parecido. Estaré encantada de leerte. Y si quieres más recetas de pan, tienes más en este blog. Ya puedes convertirte en un auténtico panarra 😜.
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