Pues aquí estoy hoy, con una receta básica, la pasta choux, que se utiliza tanto para rellenos dulces como salados, profiteroles, "pitisús", tarta Saint Honoré.....
Pues resulta que hoy es el Día Internacional del Libro, y Jose, del blog Mi fogón en tu cocina, que está todo el día inventando, ha propuesto que como homenaje a este día, publiquemos una receta que hagamos sacándola de un libro, y claro, yo también quería colaborar con la iniciativa.
De esta receta hay infinidad de versiones, pero esta en concreto es de un libro muy especial para mí, el libro de la Marquesa de Parabere, en alguna otra ocasión os he hablado de él, es mi biblia de la repostería.
Esta fue una de las primeras recetas con las que fui introduciéndome en la cocina, mi madre desde que yo era pequeña, siempre estaba consultándolo, y yo, para no ser menos, aquí os lo traigo.
Os pongo varios tipos de rellenos, ya que tenía varias cremas de otros dulces que he estado haciendo estos días, la crema pastelera de los conos de crema, una nata montada (crema de leche) y una crema de trufa que hice para una tarta.....
Y también os propongo un relleno salado, que queda delicioso, los espárragos blancos con mayonesa, con crema de roquefort también están deliciosos, pero hoy no tenía...
Yo he hecho la mitad de las cantidades y no le puse ni vainilla ni limón. Así que os cuento esta receta, que es muy fácil ya veréis...
Ingredientes:
3 huevos
160 ml de agua
1 cucharita colmada de azúcar (10 gr)
una pizca de sal
60 gr de margarina o mantequilla
120 gr de harina
1. - Primero ponemos un cazo a calentar con el agua, la mantequilla, la sal y el azúcar.
2. - Cuando empiece a hervir, retiramos del fuego y añadimos toda la harina de una vez y removemos hasta que quede una bola.
3. - Si no fuese así, ponemos al fuego un poco más hasta que la masa se separe de las paredes.
4. - Volcamos la masa en un bol y dejamos enfriar unos 10 minutos.
5. - Encendemos el horno a 180º. Y vamos añadiendo un huevo a la masa y removemos enérgicamente, hasta que quede bien ligada.
No os preocupéis si al principio os quedan una especie de pegotones, hay que seguir removiendo y queda todo ligado.
6. - Hacemos la misma operación con el segundo huevo, y removemos bien.
7. - Y añadimos el último huevo y mezclamos. Ya tenemos lista la masa.
8. - Si no tenemos manga pastelera, depositamos con una cucharita, pequeñas porciones de masa en una bandeja de horno con papel, o untada con mantequilla. Dejando espacio entre cada una que crecen bastante.
Con la manga podremos poner boquilla rizada, o lisa y hacerlos alargados, eso es a gusto del consumidor.
9. - Y metemos al horno 15-20 minutos, dependiendo del tamaño y del horno, cuando empiecen a dorarse un poco los sacamos y dejamos enfriar.
Y ya sólo queda rellenarlo de lo que queramos!!!!!
Dulces......
Salados......
Fuente: este post proviene de Recetas y a cocinar se ha dicho!!!, donde puedes consultar el contenido original.
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