Es un pastel que nos servirá para ocasiones especiales como la celebración de un cumpleaños. En mi caso lo elaboré para celebrar el de mi marido, a quien le gusta mucho el chocolate y el café, en compañía de los familiares más allegados, entre los que también se encuentran varios amantes de estos dos ingredientes tan consumidos.
La base del pastel es un bizcocho genovés, uno de los más clásicos para elaborar pasteles rellenos. Se trata de un bizcocho un tanto seco e ideal para mojar con almíbar o rellenar con diferentes tipos de cremas y dulces. También es un bizcocho que nos permite elaborar el típico brazo de gitano si lo disponemos en una capa fina. El bizcocho genovés es de origen italiano. Su nombre deriva de la ciudad de Génova, aunque en Francia también se emplea mucho bajo el conocido nombre de Genoise.
Ingredientes para el bizcocho genovés
90 gr. harina
130 gr. azúcar
40 gr. cacao en polvo
4 huevos grandes
1 pizca de sal
1 cucharadita de vainilla en polvo
Ingredientes para el relleno de crema de tiramisú
500 gr. mascarpone
3 huevos
1 cucharadita de vainilla en polvo
100 gr. azúcar
350 gr. café espresso
1 cuchara grande de azúcar
Elaboración del Bizcocho:
Batimos los huevos y el azúcar junto con la vainilla hasta doblar el volumen.
A la mezcla añadimos, la harina tamizada, previamente mezclada con el cacao y la sal.
Mezclamos todo con cuidado, en movimientos envolventes.
Engrasamos un molde con mantequilla y harina y lo horneamos a 180ºC durante 25/30 minutos.
Elaboración del relleno:
Separamos las yemas de las claras, y éstas las reservamos.
Batimos las yemas junto con el azúcar y la vainilla.
Ponemos la mezcla de yemas en un cazo al baño maría hasta que tenga una textura de crema. Dejamos templar.
Una vez templada la mezcla, le agregamos el mascarpone.
Montamos las claras y las añadimos a la mezcla de mascarpone.
Dejamos reposar todo unas 3 o 4 horas en la nevera.
Montaje del pastel:
Según el molde que hayamos utilizado el bizcocho habrá quedado más alto o menos, en función de su altura lo cortaremos para formar dos o tres pisos.
En mi caso, el molde que tengo es bastante grande, por lo que no me ha dado para hacer tres pisos; así que lo he cortado por la mitad.
Cortamos el pastel en una o dos capas y bañamos bien cada superficie con el café espresso (debe estar frío)
Cubrimos cada piso con la crema de mascarpone; cubriendo la capa superior también.
Decoramos al gusto. En esta ocasión yo sólo he espolvoreado un poco de cacao por encima en el momento de servir con unas velas para celebrar el aniversario de mi marido, pero podemos decorarlo al gusto.