George R. R. Martin es el autor de la obra Canción de hielo y fuego, sin duda más conocida por la serie de televisión en que se basa Juego de tronos, fantasía medieval, drama y aventura en estado puro.
La receta es del chef Tom Colicchio, encargado en su día de preparar el menú de los food-trucks utilizados para promocionar la serie.
Ingredientes
160 ml de buttermilk (160 ml de leche y 2 cucharaditas de zumo de limón)
45 ml de zumo de limón
ralladura de piel de limón (uno y medio)
100 g de azúcar
35 g de harina
2 yemas de huevo
2 claras de huevo
1 pizca de sal
Preparación
Precalentar el horno a 150º.
Preparar 6 moldes (ramequines por ejemplo) untándolos con mantequilla y azúcar. Colocar los moldes en una bandeja con suficiente fondo para el baño maría.
Poner a hervir un cazo con agua.
Batir las claras a punto de nieve y reservar.
Tamizar la harina, junto con el azúcar y la pizca de sal y reservar.
Batir las yemas de huevo junto con el buttermilk, el zumo de limón y la ralladura de limón.
Incorporar los ingredientes secos al bol de las yemas batidas y mezclar completamente.
Finalmente añadir las claras a la mezcla, procurando que no se bajen demasiado, mezclándolas con movimientos suaves y envolventes.
Repartir la crema entre los 6 ramequines hasta unos 2 centímetros del borde. Llenar el recipiente con el agua hirviendo hasta la mitad de la altura de ramequines.
Tapar con papel de aluminio los ramequines, introducir en el horno y cocer durante 25 minutos a 150º.
Destapar y dejar cocer durante un rato más hasta que se dore la superficie.
Sacar del horno y dejar enfriar. No desmoldar hasta que esté completamente frío, para que se asiente bien.
Si te gusta el limón, hay un antes y un después de probar los pastelillos :)
Con esta receta participamos en el reto de La cocina typical spanish, #entrelibrosandaelguiso.