Decididamente debería de abrir un apartado en ?Mi cocina? virtual de cocina italiana.
Después de tres años y medio, he de reconocer que debería comprobar todas los platos de origen italiano, aunque no sean las recetas que he publicado exactas y propias de tan maravilloso país e indicar, etiquetándolas como ?cocina italiana?, aunque la gran mayoría, su fuente sea mi imaginación o realice cambios adecuando la receta original a mis gustos personales, como en éste caso.
Este plato es todo un clásico en la cocina italiana, su nombre lo dice todo ?macarrones estriados rabiosos??.un plato de lo más picante, que yo he intentado suavizar, a fin de que no dejará un recuerdo ?imborrable? en mi paladar. La receta original suelen hacerla machacando las guindillas, hecho éste que he omitido, procurando que el sabor resultara ?alegre? y no excesivamente picante, al igual que he añadido carne picada para darle un poco más de sustancia al plato.
Los italianos llaman ?penne? a lo que nosotros solemos llamar macarrones; el penne es tubular, corto y con los extremos cortados al sesgo, mientras que el macarrón es largo, tubular y con los extremos cortados rectos.
Para ésta receta se emplea el penne rigate que es el tipo estriado, más apropiado para que impregnarse con una mayor cantidad de salsa.
He de indicar que en ?Mi cocina? (cuestión de gusto personal y es ?publicidad? gratuita, sin ánimo de lucro de ningún tipo), uso siempre la marca Gallo al huevo.
¿Cómo la he preparado?
En una sartén con un chorreoncito de aceite de oliva virgen extra (uso actualmente de Riogordo, malagueño), freir un diente de ajo laminado junto con una guindilla roja cortada en trocitos (libres de semilla?cuidado que es lo que más pica); antes de que el ajo se dore, añadir dos o tres tomates maduros cortados en trocitos (sin piel ni semillas) ó triturados (puede ser de lata), salando al gusto.
Dejar hacer hasta que el agua de los tomates desaparezca y se compruebe que está bien frito (burbujeará el aceite por encima del tomate).
Agregar una cucharadita pequeña de orégano y otra de albahaca. Reservar.
Mientras en otra sartén con un chorreón de aceite de oliva freir la carne picada, removiendo continuamente durante unos minutos.
Cuando esté frita añadir medio vaso de vino blanco, dejando cocer la carne hasta que se haya evaporado, procurando que no quede muy reseca.
Una vez hecha la carne incorporarla a la salsa de tomate, mezclando bien todo el conjunto.
Una vez preparada la salsa, siguiendo las instrucciones del fabricante, cocer la pasta en agua con un poco de sal, de forma que quede ?al dente?.
Escurrir y echarla junto con la salsa, removiendo a fin de que la pasta quede bien impregnada
El resultado es picante, puede ser muy picante, así que si no se andan con cuidado puede comprobar por qué su nombre, all"arrabbiata.