Unos pinchitos muy sencillos de preparar que resultan ideales para todos.
200 ml de vino tinto oloroso (moscatel o vino dulce, por ejemplo)
2 peras
3 láminas de gelatina neutra
1 cucharada de canela molida
Ponemos el vino a calentar en un cazo junto con la canela. Refrescamos la gelatina en agua fría un par de minutos. Cuando hierva el vino apartamos del fuego, escurrimos la gelatina y la mezclamos en el cazo. Introducimos en un molde, como por ejemplo una bandeja para cubitos. Metemos en la nevera y dejamos enfriar durante al menos 12 horas.
Pelamos las peras y las cortamos en dados pequeños. Sacamos la gelatina, la desmoldamos y cortamos en dados del mismo tamaño que los de pera. Ensartamos en palillos con cuidado de que no se rompa la gelatina y serviremos enseguida.