Hay que dar salida a esa fruta natural y cortada antes de que se nos estropee así que os proponemos esta receta, por otra parte bien rica, de las que llamamos “de aprovechamiento”.
Convierte unos trozos de fruta en un postre que es una auténtica delicia.
Ingredientes:
200 gramos de bizcochos de soletilla.
250 gr. de fruta variada cortada.
4 huevos.
450 gr. de leche.
200 gr. de azúcar.
un puñado de pasas y canela.
esencia de vainilla y jugo de limón.
caramelo líquido.
Empezamos rociando generosamente con jugo de limón la fruta cortada que tengamos y dándole un golpe de microondas para que se cocine un poco y suelte un poco de agua. Es mejor cortarla más pequeña que grande. Escurrimos las frutas y añadimos dos cucharadas de azúcar, un puñadito de pasas y reservamos. Nosotros dejamos la fruta bastante entera, la próxima vez le daremos algo más de tiempo de cocción en el microondas.
En un bol batimos bien los huevos. Les añadimos el resto del azúcar y seguimos batiendo.
Después añadimos la leche, dos cucharadas de esencia de vainilla, unos golpes de canela y batimos para integrar bien todos los ingredientes.
Preparamos nuestro molde de pudin con un poco de mantequilla y harina y, empezando por una capa de bizcochos de soletilla, vamos alternando capas de bizcocho y frutas. Otra opción, que probaremos el próximo día, es mezclar las soletillas troceadas con la fruta en vez de hacer capas.
Y cuando tengamos las soletillas y la fruta en el molde vertemos sobre todo ello la mezcla de huevos y leche que tenemos preparada.
Colocamos el molde de pudin en una bandeja con 2 dedos de agua (baño maría) y lo introducimos en el horno, previamente calentado a 170 º C, durante unos 40 ó 50 minutos, o hasta que el pudin esté firme. Nosotros lo hemos servido con unas cucharadas de caramelo líquido, hojas de menta y fresas silvestres pero puedes acompañarlo con algo de nata (crema de leche), unos frutos secos o lo que prefieras.