Por aquí sigo de vacaciones con algo más de tiempo para descansar y hacer cosas que me gustan como leer, deporte y cocinar entre otras. Y de entre los platos que me gusta preparar, sobre todo en esta época, están las quiche como esta clásica Quiché Lorraine que hoy publico. Éste es un plato de la cocina francesa, en concreto de la región de Lorena. Sin duda alguna la Quiche Lorraine es la más popular y la que más se come y yo que soy superfan de estos pasteles salados no podía dejar de prepararla.
Reconozco que me encanta la quiche y por eso podéis encontrar varias en el blog (aquí) y es que son una muy buena opción para llevar a una comida al campo ahora que ya es época. Por eso cuando vi la nata (crema de leche) sin lactosa de Central Lechera Asturiana en mi caja Degustabox no tardé nada en decidir que haría una Quiché Lorraine para mi propio deleite. He sustituido el bacon por pavo pero la versión original es con panceta, así que en vuestras manos dejo la elección.
INGREDIENTES
(molde 23 cm)
Para la masa:
1 lámina de hojaldre sin gluten o masa quebrada
Para el relleno:
125gr. de queso emmental y/o gouda cortado a dados
200 gr. de pavo cocido cortado a dados*
3 huevos
200ml de nata (crema de leche) para cocinar 18% MG sin lactosa Central Lechera Asturiana
50ml de leche sin lactosa
sal
pimienta
nuez moscada
*normalmente se hace con bacon
ELABORACIÓN
Antes que nada horneamos nuestra masa en blanco (Para ver cómo hornear en blanco pinchad aquí ). Consiste en hornear la masa dentro del molde sin nada dentro. Descripción gráfica aquí. Para ello precalentamos el horno a 180º, forramos el molde con la masa, la pinchamos con un tenedor, la cubrimos de papel de aluminio y la horneamos durante 12-15 minutos. Reservamos.
Mientras en un bol batimos los huevos con la leche y la nata (crema de leche). A la mezcla le añadiremos sal, una pizca de pimienta y otra pizca de nuez moscada.
Retiramos el papel de aluminio que cubre nuestra masa y esparcimos por dentro de la masa los dados de pavo y queso. Luego cubrimos con la mezcla de leche y huevos. Horneamos durante 25 minutos hasta que haya cuajado y la superficie esté dorada.
Servimos a temperatura ambiente con una ensaladita. ¡Rico, rico!
Disfrutad de las comidas con amigos y familia. Un saludo,