Seguro que muchas veces habéis pensando… me encantan las patatas fritas chips… ¿pero como están hechas? ¿puedo hacerlas yo de una manera sana o al menos que controle que lleva?. Pues sí se puede, y ahora os mostraremos como… pero no de patatas, ¡sino de verduras!. Sigue leyendo…
Al hacerlo nosotros mismos tenemos varias ventajas: podemos hacerlo con nuestras verduras favoritas, controlamos exactamente que llevan, podemos implicar a nuestros hijos y como luego tienen un saber crujiente, podemos convertirlas en sus nuevas “patatas fritas”, y por último como gran ventaja, se trata de una forma que conserva un gran poder nutricional y los beneficios de las verduras.
La deshidratación de alimentos consiste en eliminar gran parte del agua de estos, y ¿porque se hace esto?. Pues se trata de conservación, se le quitas el agua, evitas que se estropeen, ya que una verdura deshidratada, te puede aguantar mucho más que una fresca.
Aunque no lo hayas hecho nunca, es algo fácil, lo puedes hacer en el horno o con un aparato especial como este (si te gusta deshidratar alimentos…frutas, verduras… hazte con uno!).
Primero ponemos a precalanter el horno, 60 grados, calor y ventilador (calor arriba). Ojo: siempre hay que hacerlo a baja temperatura.
Podemos usar las verduras que queramos, hay muchas, y lo ideal, por supuesto, es hacerlo con verduras frescas de temporada, cuanto mejor la materia prima, mejor saldrán: desde calabacines, berenjenas, judias verdes, zanahorias, coles, … lo que se te ocurra.
Hay que cortar las verduras, finitas, y con piel (puedes usar una mandolina, como esta) Ahora las ponemos sobre una bandeja de horno con papel para hornear.
Lo más importante viene ahora: las debemos dejar algunas horas, para que vayan perdiendo el agua, y deshidratándose. Es importante más o menos cortarlas igual, para que todas se vayan haciendo a la misma velocidad. ¿Cuanto estarán hechas?. Lo notaras cuando estén crujientes. ¡Eso es que ya están!
Tocará dejarlos enfriar, y los guardaremos de forma hermética (una cosa es que se conserven más y otra que no hagamos un mínimo de conservación).
¿Que os ha parecido?. ¡Espero que os haya gustado!
Un abrazo,
Mónica