Me encantan estos rollitos de col. La verdad es que llevan su tiempo de preparación pero el resultado es tan rico que merece la pena invertirlo. Suelo hacerlos para ocasiones especiales y siempre son un éxito. Aguantan muy bien varios días en la nevera, así que hago una buena tanda de ellos y los voy comiendo poco a poco en los días siguientes. No te cansarán porque están riquísimos.
Es una receta divertida y original, muy típica de países como Rumanía, donde tienen por costumbre rellenar las hojas de col con carne y verduras, y luego hacen una salsa para acompañarlos.
Mi receta tiene un relleno vegetal con setas y verduras que está espectacular. Pero admite muchos otros rellenos, casi cualquiera que se nos ocurra. Por ejemplo, puedes preparar una mezcla de verduras y arroz, o utilizar legumbres. Si no eres vegetariano, puedes incluir carne picada o pescado. Todas son buenas ideas.
El repollo (berza) que te sobre utilízalo para preparar otros platos. Aquí tienes un par de ideas para incluirlo: Caldo de verduras depurativo y su crema de verduras depurativa.
Tiempo de elaboración: 1 hora
Dificultad: fácil-media
Ingredientes (para 25 rollitos)
1 Repollo grande
Para el relleno
1 cebolla
2 zanahorias
1 diente de ajo
1 calabacín mediano
350 g. de setas (en mi caso 200 g. de shitakes + 150 g. de champiñones)
Un chorrito de salsa de soja
Pimienta negra molida
Para la salsa
2 cebollas medianas
3 zanahorias
1 diente de ajo
Un chorrito de vino blanco
Un chorrito de salsa de soja
Pimienta negra molida
Un chorrito de aceite de oliva virgen extra
800 ml de agua de la cocción de las hojas de repollo
Cómo hacer rollitos de col rellenos de setas
Comenzamos separando una a una las hojas del repollo (nos resultará más fácil sacarlas si le cortamos un trozo de la base). Preparamos una olla con abundante agua al fuego. Cuando empiece a hervir, añadimos un poco de sal y sumergimos las hojas del repollo. No nos cabrán todas juntas, cocemos por tandas durante 5 minutos. Sacamos y escurrimos en un colador. Reservamos, y reservamos también el agua para utilizarla en la salsa.
Relleno: picamos muy finito la cebolla, el ajo y las zanahorias. Los pochamos a fuego medio en una sartén con un poco de aceite de oliva. Cuando empiecen a ablandarse (unos 5 minutos), incorporamos el calabacín y las setas picados en trozos muy pequeños. Añadimos un chorrito de salsa de soja y un poco de pimienta negra molida. Cocinamos todo junto durante unos 10-15 minutos hasta que esté hecho. Probamos, rectificamos de sal y pimienta si hiciera falta, y reservamos.
Salsa: picamos las cebollas, el ajo y las zanahorias. Los pochamos a fuego medio en una sartén con un chorrito de aceite de oliva. Cuando se hayan ablandado (unos 10 minutos), incorporamos un chorrito de vino blanco. Subimos el fuego para que se evapore el alcohol. Bajamos de nuevo el calor y añadimos un chorrito de salsa de soja, un poco de pimienta negra, y agregamos 800 ml. del agua de la cocción de las hojas que hemos reservado antes*. Dejamos hervir durante unos 10-15 minutos. Que se evapore un poco el agua. Trituramos la salsa.
Rollitos: extendemos las hojas del repollo. Les cortamos un trocito de la parte de abajo, la que coincide con el tallo y es más gruesa, para que nos resulte más fácil enrollarlas. Con la ayuda de una cuchara, ponemos un poco del relleno sobre la hoja y enrollamos de atrás hacia adelante, apretando para formar el rollito. Metemos los lados y continuamos enrollando. Repetimos la operación hasta hacer todos los rollitos.
Ponemos la salsa en un recipiente y vamos dejando los rollitos sobre ella. Calentamos todo junto y servimos.
Nota: * Si para la salsa no tenemos suficiente con el agua que nos ha sobrado de escaldar las hojas del repollo, completamos los 800 ml. con agua normal del grifo.