Hoy os traigo una receta sencillísima (ya sabéis que me encantan las recetas fáciles, económicas y que nos hagan ganar tiempo y quedar bien) que os va a encantar: la salsa de arándanos o “cranberry sauce”. Es una de las guarniciones típicas de Acción de gracias y nosotros la hicimos la semana pasada junto a estas Coles de Bruselas gratinadas y las Judías o habichuelas verdes con piñones (pinchad en cada una para poder ver las entradas). A mí me encantó, la verdad. Como acompañante de otras preparaciones es ideal. Y aporta un toque de color además que me encanta para estas Navidades: ¡queda tan bonita! La receta original se hace con arándanos rojos, pero como no los encontré, usé arándanos congelados azules. Normalmente tengo en casa arándanos frescos (a mis hijos les encantan), pero para cocinar prefiero los congelados (que son más baratos). El sabor quedó buenísimo y la apariencia, espectacular. Cualquier plato, con esta salsa al lado, se convertirá en un lujo al alcance de todos estas fiestas. Así que no te olvides de guardar la receta, porque vas a querer probarla seguro.
Para hacer esta salsa de arándanos necesitarás:
160 g de arándanos rojos congelados o frescos
90 g de azúcar
2 dátiles sin hueso, cortados en trocitos
60 ml de zumo de naranja fresco
125 ml de agua
1/2 cucharadita de canela
1/2 cucharadita de extracto de vainilla
Una pizca de nuez moscada
1º. En cazo vierte todos los ingredientes, salvo la nuez moscada, y lleva a ebullición a fuego lento. Cubre la mezcla y déjala hervir a fuego medio-bajo unos 10 minutos o hasta que los arándanos empiecen a romper y la mezcla empiece a espesar.
2º. Añade la nuez moscada y mueve para integrarla. Hiérvela a fuego lento otros 2 minutos. Apártala del fuego y deja que la salsa espese mientras se enfría.
1º. Verter todos los ingredientes en el vaso, salvo la nuez moscada, y programar 7 minutos/100º/giro a la izquierda o inverso/velocidad cuchara.
2º. Añadir la nuez moscada y programar 2 minutos/80º/giro a la izquierda/velocidad cuchara.
Esta salsa se puede preparar hasta con 3 o 4 días de antelación a la comida o cena especial, así que es perfecta para adelantar trabajo estas Navidades. Se conserva genial en el frigo. Cuando la vayas a servir, caliéntala un poco en el microondas un minuto. Verás cómo os encanta en casa. Ya solo tienes que usarla con imaginación para sorprender a tu familia en esos días tan especiales: como acompañante de platos principales, como base a unas ricas croquetas, combinadas con el rico puré de patatas que pronto os traeré y las judías con piñones y las coles de Bruselas gratinadas… Seguro que se te ocurren mucha formas de sacarle partido a esta salsa tan especial.
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