Ingredientes:
- 1 solomillo de cerdo.
- 200 mililitros de nata (crema de leche).
- Sal y pimienta en grano.
- Un chorro de vino blanco.
- 1 cucharada sopera de mantequilla.
- 1 cucharada sopera de aceite oliva virgen extra.
- 1 cucharada sopera de pimienta.
Limpiamos la carne y la salpimentamos. Ponemos la cucharada de aceite y de mantequilla en una sartén con fondo (ya que aquí también vamos a realizar la salsa) y marcamos la carne.
En un mortero, echamos la cucharada sopera de pimienta, a mí me gusta comprar de las que traen pimientas de varios colores, aunque lo podéis hacer con la que más os guste. Machamos la pimienta y reservamos (a mí me gusta siempre dejar algún grano entero para que luego se vea en la salsa, pero si no os gusta machacarlos todos).
Una fuente apta para horno, ponemos la carne y la metemos al horno durante 15 minutos a 200º (tiene que estar precalentado). En la sartén donde hemos marcado la carne, echamos los granos de pimienta, les damos un par de vueltas y añadimos el chorro de vino. Esperamos a que el alcohol se evapore y añadimos la nata (crema de leche), damos unas cuantas vueltas hasta encontrar el espesor óptimo de la salsa.
Sacamos la carne del horno, la loncheamos y la servimos con la salsa.
Tiempo de preparación: 25 minutos.
Gasto: 4 euros.
Raciones: 2 raciones.
Dificultad: Fácil.