Hace dos años un chico amante de la cocina y, especialmente, de la repostería, decidió embarcarse en un proyecto nuevo: crear un blog y publicar y compartir recetas dulces con todo aquel que sintiera las mismas mariposas en el estómago que él al oír las palabras cupcake, tarta o buttercream. Un chico, aunque cada vez somos más, haciéndose un hueco en un terreno donde predominan las mujeres, que ya se ha acostumbrado a que en sus comentarios le llamen "guapa" o "bonita". Pero estos comentarios le hacen gracia y le sacan una sonrisa. Ya está más que acostumbrado.
Ese chico soy yo. Feliz de hacer lo que hago, de llegar a veces a mucha gente y otra a menos, pero feliz siempre. Este blog no solo me ha dado la satisfacción de crear algo por mí mismo desde cero, de obtener resultados bonitos a base de práctica y constancia, sino que me ha permitido crecer y aprender día a día en el mundo de la repostería.
Este blog cumple dos años hoy gracias al esfuerzo de publicar una receta todas las semanas y gracias a tu apoyo, que me lees, me sigues, compartes mis recetas y, sobre todo, que las pones en práctica en casa y haces felices a los que te rodean. El blog no sería nada sin ti, así que te doy las gracias por estar ahí un año más a mi lado.
Buenooooo, qué cursi me he puesto, pero tenía que decirlo. Y ahora sí le llega el turno a la receta de hoy: una tarta primaveral, deliciosa, muy colorida y muy divertida de hacer. Además, en ella te voy a enseñar a utilizar las boquillas rusas, que se han puesto de moda últimamente y son una pasada. Así que para celebrar el segundo cumpleblog, te traigo esta TARTA DE LIMÓN Y MENTA, que espero que te guste tanto como me gusta a mí.
Como siempre te digo, puedes cambiar el sabor del bizcocho por el que más te guste, igual que la crema. Ésta es solo una combinación de sabores que me parecía interesante, pero acepta millones de posibilidades. Y si quieres recordar la tarta con la que celebramos el primer cumpleblog el año pasado, aquí te dejo el enlace: DEVILS FOOD CAKE.
INGREDIENTES PARA EL BIZCOCHO DE LIMÓN (3 layer cakes de 18 cm):
ELABORACIÓN:
Esta receta ya la he usado muchas veces para hacer los bizcochos de las tartas, pero es que queda tan bien y está tan rica que me encanta utilizarla siempre que quiero acertar de pleno. Y, además, el bizcocho no lleva leche y es apta para intolerantes a la lactosa.
1. Precalienta el horno a 180ºC y engrasa los moldes con spray desmoldante.
2. Mezcla el aceite con el azúcar utilizando unas varillas manuales, aunque si lo prefieres, también la puedes hacer con un robot de cocina.
3. Añade los huevos de uno en uno, mezclando bien el primero antes de añadir el siguiente. A medida que vayas incorporando los huevos, la masa irá adquiriendo una textura más cremosa.
4. Ahora es el momento de aromatizar el bizcocho con unas gotitas de esencia de limón y la ralladura de un limón.
5. Tamiza sobre la masa los ingredientes secos: la harina, el polvo de hornear o levadura química y la pizca de sal.
6. Te debe de quedar una masa con un aspecto y una textura similar a ésta:
7. Reparte la masa en los moldes usando una cuchara de helado para que todos tengan la misma cantidad y hornéalos durante 30 minutos a 180ºC.
8. Una vez horneados, deja reposar los bizcochos antes de desmoldarlos para evitar que se rompan. Después déjalos enfriar sobre una rejilla hasta que estén completamente fríos.
BUTTERCREAM DE MENTA:
Es fundamental la consistencia de la buttercream a la hora de utilizar las boquillas rusas, ya que con una crema algo blandita se romperían las flores y no tendrían el efecto que buscamos.
Te dejo el enlace de la Buttercream de vainilla que ya tenemos publicada en el blog, pero debes de eliminar de la receta la vainilla y la leche y sustituir los ingredientes por estos:
- 500 g de azúcar glasé seda.
- 500 g de mantequilla sin sal.
- Pasta de menta al gusto.
1. Una vez que tengas la crema básica, separa en seis boles un par de cucharadas de crema en cada uno. Esta crema la teñiremos más adelante para usarla con las boquillas rusas.
2. Aromatiza y tiñe el resto de la crema usando pasta de menta. Si no la tienes, puedes ponerle aroma de menta y teñirla con un poquito de verde.
MONTAJE DE LA TARTA:
1. En primer lugar, prepara un almíbar de limón poniendo en un recipiente 100 ml de agua con 100 g de azúcar en el microondas hasta que hierva. Después añade unas gotitas de aroma de limón y deja que se enfríe.
2. Pon el primer bizcocho de la tarta sobre una base giratoria con una base para tartas. Píntalo con almíbar y contornea el bizcocho utilizando la crema de menta para que el relleno no se desparrame. Puedes emplear una manga pastelera y una boquilla redonda.
3. Rellena el bizcocho con mermelada de fresa.
4. Vuelve a repetir los pasos anteriores para montar el segundo bizcocho de la tarta.
5. Por último, coloca el tercer bizcocho con la parte más lisa hacia arriba y píntalo con el resto del almíbar.
6. Cubre la tarta con un poco de crema de menta y alísala. Esta capa fina se denomina "sujeta migas" y ayuda a poder decorar mejor la tarta sin que se rompa el bizcocho. Déjala enfriar en la nevera hasta que esté completamente dura.
7. Cubre toda la tarta con el resto de la crema de menta, tanto por los laterales como por la parte superior. Puedes dejarla lisa o hacer algún dibujo con la espátula. Yo he optado por una espiral en la parte superior y unas franjas en los laterales. Guarda un poco de crema para usar con las boquillas rusas.
DECORACIÓN CON BOQUILLAS RUSAS:
1. Tiñe la crema blanca que habías reservado con los colores que prefieras. Para darle un toque más suave y natural hemos optado por colores pastel: morado, rosa, amarillo y coral (naranja clarito). Tiñe dos boles con diferentes tonos de verde para hacer las hojas más tarde.
2. Elige tus boquillas rusas preferidas. La ventaja es que puedes hacer flores preciosas con una boquilla sin tener que hacerlas pétalo a pétalo como ocurre con las convencionales. Las mías las compré en My Karamelli, una tienda de artículos de repostería creativa, que está muy cerca de casa, en Alicante. También puedes adquirir sus productos en su tienda online para que te los envíen a casa.
3. Prepara las mangas pasteleras con las boquillas rusas. Ponlas dentro, recorta la punta y rellena en primer lugar las paredes con un poco de crema de menta. Así conseguirás que la crema tenga dos tonos y queden flores más realistas.
4. En el centro de la manga introduce la crema del color que prefieras.
5. Realiza los mismos pasos hasta tener las cuatro.
6. Después rellena una última manga con los dos tonos de verde, uno en cada mitad de la manga, usando una boquilla para hacer hojas. Las más habituales son la número 352 y la 69 de Wilton.
7. Comienza decorando el contorno de la tarta haciendo una corona de flores. Es muy importante que la boquilla esté en contacto con la tarta para que se forme la base de la flor. Si quieres una flor pequeña, cuando empiece a salir la crema, deja de presionar para que no salga más y levanta la manga hacia arriba para que ésta se forme. Si las quieres un poco más altas, sigue presionando mientras levantas la manga en vertical.
CONSEJO: al principio resulta difícil, por eso es mejor practicar en una tabla o una superficie lisa antes de hacerlo directamente sobre la tarta.
8. Puedes alternar las flores, los colores, seguir un patrón determinado o hacerlo libremente. Intenta no dejar demasiada separación entre unas flores y otras.
CONSEJO: para que las flores salgan perfectas es necesario que la crema tenga la consistencia idónea. Si ves que no está lo suficientemente firme, puedes meter durante 5 minutos las mangas en la nevera.
9. Cuando ya tengas todas las flores, rellena los espacios entre unas y otras con hojas. Presiona la manga y haz un movimiento hacia el lado o hacia arriba de la flor. Puedes poner las hojas que quieras hasta dejarla a tu gusto. Las hojas en dos tonos le dan el toque perfecto para que quede real y resultona.
10. Pon hojas por el centro de la corona de flores y en los bordes de la tarta para tapar cualquier posible imperfección. Para terminar, déjala en la nevera media hora para que la crema quede bien firme y la tarta tenga un aspecto perfecto.
Y el resultado final es esta tarta tan bonita. Y no solo eso, además está muy rica y es muy refrescante ya que el limón y la menta, además de ser muy digestivos, combinan de maravilla.
Por supuesto, no podía faltar la vela con el número 2 para celebrar el segundo cumpleblog de La Cucharita. Esperamos que haya un tercero y un cuarto... ¡Y los que hagan falta!
Una vez más, muchas gracias a mi familia y amigos por apoyarme siempre y a todas las personas con las que he tenido relación y contacto, directo o por las redes sociales, gracias al blog durante estos dos añitos. ¡Estoy encantadísimo de poder cumplir años con vosotros!
Y como todas las semanas, te recuerdo que puedes suscribirte al blog dejándome tu email en la parte derecha. Luego solo tendrás que confirmar la suscripción cuando recibas un mail, así tendrás todas las recetas para buscarlas siempre que quieras. Y no te olvides de darle al "me gusta" en la Fan Page de Facebook, en Instagram y Twitter. Cuantos más seamos, más divertido será interactuar con más gente.
Te espero la semana que viene con una nueva receta. ¡No faltes!
Un abrazo enorme.
Jon
Fuente: este post proviene de La cucharita del postre, donde puedes consultar el contenido original.
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