Cuanto tiempo hace que le tenía ganas a esta tarta. Con la de veces que había leído que es la mejor que se puede probar no se como he tardado tantos años en hacerla.
No he tenido el placer de probar la original del restaurante "La Viña" en San Sebastián, pero se que mi compañera bloguera Maria Jose del blog "Dit i fet" iba a reproducirla bien, así que opté por su receta para animarme.
He de deciros que los comentarios y alabanzas son ciertas y bien merecidas, es una tarta diferente a todas las que he probado. Por los ingredientes que lleva no siendo precisamente ligeros da la sesación de ser pesada, pero al probarla me sorprendió mucho ya que es todo lo contrario, suave y no excesivamente dulce.
Uno de los consejos que se da para comer esta tarta es no acompañarla de mermelada, simplemente disfrutar de ella misma por si sola.
Algo de fruta fresca no le va mal, por eso aunque no haya cerezas podéis optar por alguna otra fruta como uvas o simplemente obviarla, es deliciosa.
INGREDIENTES- molde 25cm
6 huevos
1 kg de queso crema
500ml de nata (crema de leche) líquida para montar (mín 35% m.g)
400gr de azúcar
1 cucharada colmada de harina de trigo
ELABORACIÓN
Preclanetar el horno a 200º
Si tenéis vaso batidor, lo añadís todo y batís para mezclar bien.
Si lo hacéis a mano batimos lo huevos con el azúcar, añadimos la nata (crema de leche) y el queso a temperatura ambiente hasta mezclar todo bien.
Forramos un molde desmontable con papel de horno.
Horneamos durante aproximadamente 1 hora y 15 min o hasta que al pinchar en el centro salga limpio.
Dejamos enfriar y llevamos a la nevera un mínimo de 4 horas. Mejor si la preparamos de un día para otro.