Este año me ha cogido con un virus estomacal raro que me tiene todo el día con un asco que no veas (la segunda vez que me da este año ya). Por este motivo casi no llego a tiempo, estaba esperando a estar mejor, pero visto que esto no pasaba, en el ultimo momento me he puesto manos a la obra.
La base de la tarta la saqué de Julia y sus recetas.
La receta la escogí precisamente por estar mala, me parecía una tarta que sería ligera al paladar, de estas que te comes sin darte cuenta… y la verdad que tal cual, es una tarta deliciosa (mala, con asco y todo me comí un trozo y me encantó) mi chico ya lleva media tarta. Es un éxito asegurado, tiene un sabor espectacular.
Usé un molde de 18 cm de diámetro
Ingredientes para la base;
90 gr de galletas maría
35 gr de mantequilla
Ingredientes para la tarta;
100 ml de leche
70 gr de azúcar
3 yogures griegos
200 ml de nata (crema de leche) líquida
4 láminas de gelatina
Fresas para decorar.
Picamos las galletas hasta dejarlas hechas polvo, las mezclamos con la mantequilla derretida y cubrimos el fondo del molde. Reservamos en la nevera.
Ponemos la gelatina a hidratar en agua fría y mientras tanto calentamos la leche con el azúcar.
Añadimos la gelatina a la leche caliente ya fuera del fuego y removemos para que se deshaga. Dejamos que entibie y añadimos los yogures.
Montamos la nata (crema de leche) liquida y la vamos añadiendo con cuidado y movimientos envolventes a la mezcla anterior hasta que se integre perfectamente.
Vertimos la mezcla sobre la base de galletas y llevamos a la nevera por un mínimo de 4 horas. Mucho mejor de un día para otro.
Picamos las fresas como mejor nos parezca para decorar la tarta con ellas.
No tengo foto del corte porque como ya os digo, hice la receta el ultimo día a la carrera y apenas tuve tiempo de dejarla reposar, no fue un acierto colocar las fresas como las puse porque pesaban bastante y no tenía aun consistencia suficiente para aguantarlas, así que hice las fotos, las quité y las pique menuditas y volví a ponerlas encima. Mucho mejor por cierto hacerlo así porque luego al comer la tarta te tocan fresas en cada bocado.
En fin, esta es mi propuesta y os invito a ver el resto de maravillosas tartas mousse que han preparado mis compañer@s del desafío AQUI.