Realmente, no es una receta con mucha ciencia, pero el resultado es estupendo y además muy fácil de hacer
Para cuatro comensales, necesitamos:
4 Cuartos traseros de pollo deshuesados y salpimentados
1 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
3 cucharadas de sésamo blanco
2 cucharadas de salsa de soja
1 cucharada rasa de harina
1 vaso de caldo de pollo
1 chorrito de limón
500 g de tomate triturado
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Una cucharadita de ralladura de jengibre
Sal y pimienta y un poco de azúcar para quitar la acidez
Una cucharada de miel
Este plato me gusta acompañarlo en la base, como cama de una salsa de tomate sencillita, pero agridulce. En aceite de oliva y a fuego medio, colocamos nuestras ralladuras de jengibre. Removemos unos segundos para que lo aromaticen y añadimos el tomate junto con la sal, pimienta, azúcar y miel. Dejamos reducir hasta que dejemos de ver el agua en la misma, como unos 10 minutos. No es un tomate frito, sino una salsa. Reservamos
Vamos a tostar el sésamo en una sartén si nada. Cuando empiece a oler, lo apartamos y reservamos un poco para decorar el plato. El resto lo majamos con el mortero, añadiéndole gotitas de agua hasta obtener una pasta deliciosa que se llama Tahina. Reservamos
Ahora en una plancha o una sartén y a fuego medio vamos a asar nuestros trozos de pollo. Lo pondremos con la piel hacia abajo, unos 7 u 8 minutos. Cuando esté dorado y crujiente le damos la vuelta y repetimos la operación. El resultado será un pollo crujiente y dorado por fuera y jugoso por dentro. Sacamos y apartamos en un plato.
En ese jugo/salsa que hemos obtenido en la sartén, añadimos una cuchara de aceite de oliva y luego la harina. La tostamos unos segundos y luego añadimos el caldo caliente, para que no nos salgan grumos poco a poco, y sin dejar de remover. Luego, las gotas de limón, salpimentamos y ponemos la salsa de soja y la Tahina al gusto. Dejamos reducir hasta obtener una salsa densita pero ligera.
Montamos el plato. En la base la salsa de tomate, encima, haciendo un volcán el pollo cortado en tiras, con la salsa rociada por encima y los granos de sésamo tostado.
Así que nada, besos a todas, a todos, besos a……, en fin muchos besos e intentad ser felices, que es más fácil de lo que parece. Hasta otra o hasta siempre.