Todo empezó cuando fui a Asturias a pasar el puente de mayo. Allí descubrí las judias verdinas. Nunca antes las había visto ni había oído hablar de ellas y me llamaron la atención sobre todo por su precio elevado, unos 15 euros el kilo, algo raro en las legumbres. Al llegar a casa empecé a investigar y descubrí que son tan caras porque la producción es escasa y son más finas y sabrosas, por lo que son también muy valoradas a nivel culinario. Mira tú por dónde, comprando un día el pan en un negocio local, me doy cuenta de que tienen verdinas y me animé a llevármelas.
Como había leído que eran tan buenas, quería hacer algo especial y de la manera más especial así que esta mañana me he levantado decidida a cocerlas a fuego lento según la manera tradicional. Tendría que haber salido el puño ese del anuncio y estamparme contra la puerta al ritmo de un coreado: "ERROR", porque no pensaba yo que las malditas judías tardaban tantísimo. Después de tres horas de cocción, no me ha quedado más remedio que pasarlas a la olla express y terminar ahí la receta rompiendo la fantasía que me había montado yo de mis judías cocidas a fuego lento, pero las cosas no siempre salen como uno quiere y hay que resignarse y adaptarse a las circunstancias. La cocina cuando quiere, te baja de la nube y te pone en tu sitio pero bien puesta...
El caso es que al final, a pesar de las visicitudes, me ha quedado un plato rico y bastante majo. Lástima que yo no lo haya podido disfrutar del todo, más que por la rabia porque me he comido más de la mitad de las judías probando el punto de cocción...
Así que, ya sabéis, si os gusta la receta pensad dos veces si queréis hacerlas a fuego lento... la olla también da excelentes resultados.
VERDINAS CON ALMEJAS Y BACALAO
Para 2 personas:
200 grs de verdinas
(si no las encontráis podéis usar cualquier otro tipo de judía,
aunque mejor si usais judía blanca); 300 grs de almejas de calidad;
150 grs de migas de bacalao desalado;
1 puerro; 1 trozo de pimiento verde;
Agua; 2 dientes de ajo; Perejil fresco picado;
Azafrán en rama; Vino blanco seco;
Aceite de Oliva; Sal
Agar-Agar (alga espesante, si no se encuentra se puede usar harina)
Comenzamos poniendo las judías en agua la noche anterior. El día en que vayamos a cocinar el plato, ponemos las almejas en agua con un puñado de sal gorda para que suelten la arena como mínimo durante media hora.
Escurrimos las judías y las ponemos en la olla express cubriéndolas con agua, como unos 4 dedos por encima de las verdinas y las ponemos al fuego. Cuando rompa a hervir el agua veremos que sale una espumita. Esa espuma son impurezas y hay que quitarla con ayuda de una cuchara.
Limpiamos y troceamos finamente el puerro y el pimiento. Añadimos aceite en una sartén y pochamos durante unos diez minutos a fuego medio-bajo. Una vez listo, añadimos a las judías y removemos. Desleímos el azafrán en agua templada y lo añadimos al guiso cuando el agua rompa a hervir de nuevo. Tapamos la olla y dejamos cocer unos 35-40 minutos.
Troceamos el bacalao. Pelamos y picamos un diente de ajo y lo ponemos a dorar en una sartén con aceite. Una vez dorado, añadimos el bacalao y salteamos.
Cuando las judías estén listas, abrimos la olla y añadimos el bacalao. Es ahora el momento de añadir la sal.
Ponemos el agar-agar en un cazo con agua y cocemos durante 4 minutos aproximadamente hasta que se deshaga. El agar-agar es un alga natural que sustituye a la harina como espesante y no da sabor, es muy fácil de encontrar en cualquier gran superficie o en herbolarios, os animo a probarla, sobre todo si tenéis algún tipo de intolerancia alimenticia. Y si os preocupa el precio, no tengáis miedo porque no es cara.
Escurrimos las almejas y las aclaramos bien para eliminar todos los restos de tierra que puedan quedar.
Pelamos y picamos el otro diente de ajo y lo ponemos también a dorar en una sartén con aceite. Cuando empiece a dorarse añadimos un chorrito de vino blanco seco y cuando se evapore, añadimos las almejas y tapamos. Dejamos que se abran. Esta operación tarda unos 3-4 minutos.
Una vez abiertas, escurrimos con ayuda de un colador reservando el caldo que añadiremos colándolo una vez más a las judías y después las almejas. Añadimos perejil picado y dejamos cocinar todo junto durante unos 5 minutos aproximadamente a fuego bajo.
Ya sólo nos queda servir nuestras judías con un chorrito de aceite de oliva virgen extra en crudo para darle un toque de sabor, y con un poquito de perejil fresco picadito.
Ha costado, pero al final hemos conseguido comernos estas ricas verdinas con almejas.
¡Buen provecho y hasta el próximo post!