Las albóndigas en salsa son de lo más tradicional en las mesas españolas. Cada uno las prepara como le parece o como aprendió de su madre o de su abuela. Junto con la tortilla de patatas, el arroz en paella y algún que otro plato más, puede que sea de los más popular en la piel de toro.
Lamento no poder mostrar más que una foto de la preparación de este plato, pero como quiero agilizar el blog, no me espero a tener fotos del paso a paso y os muestro la única foto que conservo de la elaboración de estas albóndigas. La hice con el móvil para subirla a mi Instagram. Un exagerado despiste hereditario (mi madre sabrá a que me refiero -si se acuerda-) hace que pierda u olvide un montón de cosas, en este caso tomar las fotos o saber donde carajo las metí.
INGREDIENTES:
Pan de molde sin corteza (2 rebanadas).
Carne picada de ternera (500 gr)
Leche (medio vaso)
Ajo (1)
Cebolla (1)
Perejil fresco (1 manojo)
Huevo (1)
Pan rallado (100 gr)
Harina de trigo (1 cucharada sopera)
Sal
Pimienta negra
Aceite de oliva
Vino fino (1 copa)
Caldo de carne (1 vaso)
Salsa de tomate frito (2 cucharadas)
Laurel (1 hoja)
Mantequilla (20 gr)
PREPARACIÓN:
Moja las dos rebanadas de pan de molde con un poco de leche. Escúrrelas apretándolas.
Pon la carne picada en un bol grande y le añades la miga de pan mojada en leche, un ajo muy picado, un poco de perejil fresco picado, un huevo y un poco de sal y pimienta. Mezcla bien todos estos ingredientes y haz las bolas de carne.
Prepara un bol con pan rallado y embadurna las albóndigas una a una.
Fríe las albóndigas en una sartén con aceite de oliva hasta que estén doradas por todos lados. Resérvalas en una fuente.
En otra sartén y utilizando parte del aceite donde has frito las albóndigas, haz un sofrito de cebolla picada.
Cuando la cebolla esté dorada, añade una cucharada de harina de trigo y tuéstala.
Añade el vino fino, el caldo de carne o un fondo oscuro y la salsa de tomate frito.
Tritura esta salsa y pásala por un colador.
Devuelve la salsa pasada a la cazuela e incorpora las albóndigas y una hoja de laurel.
Tapa la cazuela y baja el fuego hasta que se hagan en unos 15 minutos.
Pasados los 15 minutos, añade unos trocitos pequeños de mantequilla fría y mueve hasta que desaparezcan.
Prueba la salsa y corrige la sazón si fuera necesario.
Acompaña de puré de patatas (como he hecho yo en esta ocasión), de arroz blanco o de patatas fritas y DISFRUTA.