Estas albóndigas son muy ricas, y les puedo decir que a los pequeños les encantan, pero a los grandes, bueno, les fascinan, pues tienen un rico sabor a chile chipotle en su salsa de tomatillo y además son suaves, esponjosas, en fin, muy ricas... creo que toda esta semana les he compartido muchas recetas que llevan tomatillo verde, pues si no consigues este ingrediente en donde vives, puedes utilizar tomate rojo, pero si logras conseguir aunque sea 2 tomatillos de buen tamaño será mucho mejor, puedes utilizar el tomatillo de lata, siempre y cuando esté entero y lo puedas picar y no esté muy suave, creo que eso depende de la marca del producto. Pero si no consigues, no te preocupes mucho, cuando lo hagas ya las prepararás como debe de ser, y recuerda que las puedes cocinar con el tomate rojo en lugar del verde; estas albóndigas le encantan a mi pequeña, son de los platos que por lo general me pide que le vuelva a servir y por lo mismo procuro prepararlas de un tamaño pequeño, en el que un niño pueda tomarlas con facilidad, sin ver una albóndiga enorme, y así le sirvo unas 3 ó 4, además de que al no llevar grasa adicional mas que la que tiene la carne, de la que procuraremos que sea de lo más magra que se pueda, pues no será un platillo grasoso, así es que tampoco habrá culpa.... pero mejor pasemos a la receta y prepara las albóndigas del tamaño que más te guste, sólo toma en cuenta que entre más grandes, tendrás que cocinarlas más tiempo para que el centro de las mismas llegue a cocinarse por completo...
Ingredientes:
500 Gramos de Carne de Res Molida sin grasa
1 Bote mediano de Puré de Tomate
Chile chipotle al gusto
1/2 taza de Arroz remojado por 20 minutos y escurrido
2 Tomatillos verdes de buen tamaño, puedes sustituirlos por tomate rojo, pero lo ideal es que sea del verde
1 Trocito de cebolla
1/2 diente de ajo
1 Huevo
Sal y Pimienta al gusto
Unas hojitas de Hierbabuena picadas finamente
Procedimiento:
Mientras preparas la carne cocina el puré de tomate, sólo tendrás que vaciar el contenido del paquete en una cacerola honda y llenarlo 3 veces de agua, necesitamos que la salsa comience un poco líquida para que alcance a cocinar las albóndigas hasta el centro, ya que el arroz que contiene la mezcla de carne se irá esponjando y hará que se espese la salsa, así es que la necesitamos un tanto líquida, pero sin quedar muy rebajada, si notan que les falta un poco más de agua, pueden agregarle pero poco a poco. Cuando se está cocinando la salsa es el momento de agregar el chile chipotle al gusto, recuerden que es picoso, así es que tienen que ponerle la cantidad que ustedes gusten pero pensando que si van a consumir este platillo niños que no estén acostumbrados al picante, eso no les va a agradar mucho, así es que mejor ponerle un poco, lo pueden licuar en la misma salsa, o bien, agregar un trocito, como ustedes gusten, de cualquier forma llenará de sabor el guisado.
Así es que en lo que la salsa se cocina, haremos la carne, debemos licuar el ajo y la cebolla con un poquito de agua, no se necesita mucho, sólo es para permitir que estos dos ingredientes se licúen bien, cuando ya lo hicimos, acomodamos la carne en un bowl para poder integrar los ingredientes de manera más sencilla, y ponemos encima de la carne la mezcla de cebolla con ajo, el tomatillo picado muy finito, en cubitos muy pequeños, las hojitas de hierbabuena, el huevo, el arroz lavado, remojado y escurrido, la sal y la pimienta al gusto y revolvemos todo hasta integrar, haremos una mezcla de carne con todos estos ingredientes perfectamente integrados, cuando tenemos esto listo, sólo vamos a formar las albóndigas del tamaño que ustedes gusten, para este momento, lo más seguro es que el recaudo o salsa ya esté hirviendo, así es que hay que bajarle al fuego lo más que se pueda, y vamos a ir agregando las bolitas de carne, procurando que no se empalmen, ya que si esto sucede se pegarán y lo que les quedará será una salsa de carne al chipotle apta para una lasagna bastante interesante, pero no una lasagna tradicional, de eso pueden estar seguros, pues la verdad es que quedaría deliciosa si se prepara de esa manera, sólo que esa es otra receta, pero ténganlo en cuenta cuando quieran variar algún platillo, así es como surgen las grandes recetas, o las recetas de la casa, con pequeñas ideas, pequeños cambios que les queramos dar, o simplemente si queremos imprimir nuestro toque en un platillo, pero mejor continuemos con esta preparación, cuando hemos terminado de hacer las albóndigas y de irlas agregando con cuidado en la salsa hirviendo, debemos remover con mucho cuidado pues podemos romperlas, de hecho si notan que la mezcla de carne está muy floja, no se preocupen, como agregamos el huevo, esto hará que permanezca unida y no se desbarate, el problema es si las movemos con rudeza, pues entonces las romperemos, tiene que ser con sumo cuidado y de forma de que si se han pegado alguna en el fondo las separemos sin que sufran ningún daño, hay que rectificar el sabor en cuanto ya estén cocinadas, o puedes agregar la sal y la pimienta que estés acostumbrada y sólo al final compruebas que no le falte, como verán nunca le agregamos grasa o aceite, pues no lo necesita, sólo debes tener cuidado que no se peguen al fondo de la cacerola, y que mantengas el fuego lento y que si las haces muy grandes, tomes en cuenta que tiene que alcanzar a cocinarse el arroz que llevan en la mezcla, así es que si notas que les hace falta líquido agrégalo, pero no mucho, para que tenga buena consistencia la salsa y no quede diluida, recuerda que el arroz se esponjará pero necesita humedad para lograrlo, de ahí que tengas que estar al pendiente de ese nivel de humedad que se necesita, en cuanto veas que el arroz ya está cocinado estarán listas las albóndigas; yo las sirvo precisamente con más arroz, al que le puedes poner un poco de verduras, en esta ocasión le agregué granitos de elote, pero puedes ponerle trocitos de zanahoria, chícharos, calabacitas, en fin, lo que se te antoje, espero que te gusten y si tienes pequeños en tu casa les encanten y por lo menos con este platillo te quedas tranquila, pues ya comieron verduras sin saberlo, y les encantaron; también puedes poner a cocer un poco de pasta y servirlas juntas, es cuestión de gustos...