Con esta receta conseguí escuchar a mi marido decir que las alcachofas están buenas....y todo gracias a esta receta de mi madre.
Aunque se suele comentar que dan mucho trabajo, no es para tanto, ya vereis que rápido las limpiamos.
Ingredientes (para 2 personas)
6-8 alcachofas
jamón
2 cebolletas
1 diente de ajo
pan rallado
1/2 vaso de vino blanco
agua
aceite de oliva
sal
Limpiamos las alcachofas quitándolas el tallo y parte de las hojas externas, y cortándolas apróximadamente por la mitad. Las lavamos y las frotamos con medio limón, para evitar que se pongan negras.
Las cocemos en una cacerola, cubriéndolas con agua y con un poco de sal, durate unos 20 min.
Cuando estén las escurrimos, pero guardamos como un vaso de ese agua. Reservamos las alcachofas en la misma cacerola.
Mientras se cuecen, vamos preparando el relleno. Picamos la cebolla y la pochamos en una sartén con un buen chorro de aceite.
Añadimos el jamón y el vino, que dejaremos reducir. Echamos el pan rallado, unas 2 cucharadas y si queréis el interior de la alcachofa ya cocido y bien picado. Esto es opcional, si no lo hacemos, echaremos el relleno por encima, abriendo las alcachofas un poco por el centro. Cocinamos a fuego medio, hasta que espese un poquito.
Cogeremos el relleno y lo repartiremos en nuestras alcachofas.
Cómo nos sobrará parte del relleno, añadiremos a la sartén donde lo tenemos, media cucharadita de harina; lo tostamos e incoroporamos el caldo de la cocción que hemos reservado. Dejamos que espese y ya tenemos una salsa para nuestras alcachofas.
Buen provecho!