En la parroquia de Padrón, en la Coruña (Galicia), en el convento franciscano San Francisco de Hebrón, encontramos el origen de estos pimientos. Donde los monjes franciscanos, a su regreso de las Américas a finales del siglo XVI, comenzaron a cultivarlos. La climatología de Galicia y el tiempo, han transformado este pimiento importado, ofreciéndonos actualmente ese tamaño y sabor tan peculiar que conocemos.
Esta receta es fácil y rápida de elaborar, y con un sabor... brutal!!! jajajaja la mezcla de las ALMEJAS CON LOS PIMIENTOS DEL PADRÓN es impresionante. Además, en el video que hay bajo estas lineas, no solo podéis comprobar lo rápida que se hace esta receta, además os enseño el truquillo para que las almejas queden jugosas. Vamos a cocinar!!!!
INGREDIENTES
-Pimientos del Padrón
-Almejas
-Aceite de Oliva Virgen Extra
-Vino Blanco
-Laurel
-Limón
-Sal
En un olla no muy grande, metemos 250 g de almejas con una hoja de laurel, medio limón, y 2 cucharadas de agua. Encendemos el fuego y vamos sacando las almejas a medida que se vayan abriendo, es importante para que queden jugosas. Cuando hayamos sacado todas las almejas, cogemos el caldo que ha quedado, lo colamos para extraer las cascaras rotas y la arena, y reservamos.
Ahora en una sartén, con un chorro de aceite virgen extra, freimos un buen puñado de pimientos del padrón con un poquito de sal. Cuando los pimientos estén bien hechos, le tiramos por encima el caldo de las almejas que habíamos reservado, y a continuación medio vaso de vino blanco.
Cuando el caldo y el vino rompan a hervir, añadimos las almejas, removemos y lo dejamos todo un minutillo. Ya está listo para servir.
Fácil, rápido y con un sabor... espectacular. Deseo que te guste esta receta, y recuerda, si quieres ver más batallas del GUERRERO podéis pasar por su CANAL DE YOUTUBE haciendo CLIC aquí. Y si queréis pasar por su Castillo a saludarlo, Hacer CLIC Aquí para entrar en su WEB. Mientras tanto... Gracias y Abrazos GUERREROS, Besos PRINCESAS