Ingredientes:
- 7 yemas de huevos de gallinas felices
- 7 claras de huevos de gallinas felices
-350g de azúcar blanco
- 225g de harina
- 400ml de agua
- 2 cucharadas de café instantáneo
-30g de cacao en polvo
- 70ml de aceite de girasol
- 2 cucharaditas de vainilla en pasta
- 1/2 cucharadita de cremor tártaro.
Paso a paso:
1. Empezamos preparando el toque especial de nuestro angel food cake, el chocolate y el café. Ponemos los 400ml de la agua en una ollita, ponemos el fuego alto y justo cuando empiece a hervir añadimos el cacao y el café, removemos durante 1 minuto y paramos el fuego. Dejamos templar y reservamos para más adelante.
2. Ponemos en el bol de la KA el azúcar, la harina y las 7 yemas de gallinas felices. Removemos hasta que tengan aspecto de migas. Añadimos también la vainilla en pasta.
3. Cuando haya enfriado por completo añadimos la mezcla de chocolate, café y agua teníamos reservada poco a poco. Una vez se hayan integrado todos los ingredientes los vertemos todo en un bol y reservamos para más adelante.
4. Ponemos las claras en el bol de la KA. Añadimos la pizca de sal y el cremo tártaro, mezclamos a velocidad baja durante 1 minuto hasta que se disuelva por completo.
5. Aumentamos a velocidad media y empezamos a batir las claras. Pasado 1 minuto subimos a velocidad máxima y batimos durante 2 o 3 minutos mas. Las claras deben montarse por completo formando picos blandos.
Bajamos a velocidad media-baja, sin dejar de batir ningún momento. Añadimos el azúcar, cada 7 segundos una cucharada. Así progresivamente hasta incorporar todo el azúcar. Cuando hayamos integrado todo el azúcar, las claras estarán brillantes.
6. Añadimos las claras montadas a la mezcla del chocolate y café. Con ayuda de la espátula y con muchísima delicadeza integramos las dos mezclas entre sí.
7. Volcamos la mezcla en el molde, con mucha delicadeza. Suavizamos la superficie, para que quede lo mas uniforme posible. Tampoco tiene que quedar perfecto, porque la parte superior, será la parte inferior del pastel.
8. Horneamos a 180ºC durante 45-50 minutos, sin abrir en ningún momento el horno.
9. Pasados los 45 minutos, sacamos del horno y con delicadeza ponemos el molde al revés. Dejamos enfriar durante 1 hora boca abajo.
10. Pasado este tiempo, con un cuchillo o espátula repasaremos los bordes, para que se despegue. Cuando hayamos conseguido separar los bordes, hacemos lo mismo con la base. Ponemos el pastel sobre una rejilla y dejamos que enfríe de nuevo durante 1 hora mas.
11. Servimos en un plato, espolvoreamos azúcar glass por encima y ya está listo. Para cortarlo hacerlo con un cuchillo de sierra y con delicadeza. Mientras está caliente es muy frágil, una vez frío ya no lo es tanto. Yo fui impaciente al desmoldar y se me rompió un poquito por eso lo he puesto al revés, quedando la parte más fea en la parte superior.
Fuente: este post proviene de Dulce Muffin, donde puedes consultar el contenido original.
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