Miles fueron los malagueños, los andaluces que marcharon a Cuba. Miles los que allí quedaron y miles también los que regresaron, los que volvieron a los puertos andaluces después de la Independencia (Cuba dejó de ser colonia española el 20 de Mayo de 1902).
En los libros de historia, revistas y periódicos de la época se describían con detalle el desembarco de soldados que regresaban de la guerra, que a finales del siglo XIX, principios del XX, llegaban al puerto malagueño, procedentes de Cienfuegos o de La Habana. Soldados y familiares, andaluces, los que sobrevivían a la travesía, que regresaban a la península enflaquecidos, bronceados por el sol tropical, con los ojos brillantes por las fiebres, la gran mayoría enfermos y derrotados.
¿Cuántos malagueños se embarcaron en buques militares que partieron del Puerto de Málaga en dirección a la guerra de Cuba, combatiendo durante años?
Entre ellos, Pedro ?El vigía Puerta Oscura", personaje de ficción, aquél que nació en la imaginación de un gran amigo de mi marido y mío, un gran escritor y dramaturgo, Juan Luis Pinto; quien dio vida no sólo a Pedro, el protagonista de su fantástico libro (a cuya presentación tuvimos el placer de asistir) , sino también a su compañero de travesía, un gran amigo, ?cantaor? malagueño que le acompañó en aquella guerra Cubana, tierra que tan bien describe el autor.
Un ?cantaor? figurado, que para mí fue real, existió. nació en el malagueño barrio del Perchel (Los Percheles), se llamaba Rafael Flores Nieto. Su desdicha le llevó hasta la guerra de Cuba, un gitano alegre, guitarrero y canturrón, que se trajo de aquellas tierras una especie de tangos aguajirados que él mismo componía y cantaba por las tabernas y colmaos de Málaga, le llamaban ?El Piyayo?.
Miles volvieron de Cuba y nos trajeron en sus corazones, sus duras vivencias, también sus añoranzas, sus recuerdos, su cultura, su embrujo, parte de su gastronomía?..
Quizás, casi sin darnos cuenta, es verdad aquella canción que popularizó Carlos Cano que decía:
Que tengo un amor en La Habana y el otro en Andalucía, no te he visto yo a ti, tierra mía, más cerca que la mañana que apareció en mi ventana, de La Habana colonial tó Cádiz, la Catedral, La Viña y El Mentidero...Y verán que no exagero si al cantar la habanera repito:
La Habana es Cádiz con más negritos,
Cádiz, La Habana con más salero.
Andalucía?Cuba, Cuba?.Andalucia.
¿Vendría ésta receta de Cuba, será un plato cubano, es español??
Aunque el nombre lo dice muy clarito: arroz a la cubana, hay quien asegura que es una receta cubana, hay quien sostiene que es originario de nuestro país: es posible que sea una variante de alguna de las recetas procedente de la cocina caribeña modificada y traída a la península durante la Cuba Colonial.
Sí es cierto, que hoy en día se puede degustar en Cuba, donde se suele servir arroz blanco con huevos y plátano maduro fritos, el que se conoce como platanito fruta o marteño y que en Cuba se denomina ?seda?, aunque generalmente servirán los plátanos ?machos? maduros.
La ?receta cubana? no lleva salsa de tomate?y aunque Vds. conocerán ésta receta, todo el mundo la conoce en nuestra tierra, hoy les animo a prepararlo y disfrutarlo.
Un plato sencillo, fácil y rápido de hacer, en el que lo salado y lo dulce ofrecen su mejor contraste.
Y recuerden, si van a Cuba: pida arroz blanco con huevos y plátano maduro fritos. Lo de ?arroz a la cubana? sólo lo entendemos en España.
¿Cómo lo hice?
Ingredientes:
Arroz redondo, plátano, salchichas frescas (de carne de cerdo), sal, aceite de oliva, huevo, tomate triturado (sin piel, ni semillas), un trozo de cebolla blanca dulce.
Los pasos a seguir:
En una sartén con aceite de oliva pochar la cebolla troceada sin que se llegue a quemar, añadiendo el tomate, dejándolo hacer hasta que el aceite burbujeando quede por encima del tomate, salar al gusto . Pasar por un pasapuré a fin de que los trozos de cebolla queden pasados.
Mientras cocer el arroz (siguiendo las instrucciones del fabricante), con cuidado de que no se pase. (Cortar la cocción, pasándolo por el grifo, con agua fría, a fin de que quede suelto).
En una sartén echar unas gotas de aceite y freir las salchichas, salándo también al gusto.
En otra sartén con unas gotas de aceite, freir los plátanos.
Y freir el huevo, también en otro recipiente con aceite de oliva virgen extra (en ésta ocasión lo puse en un molde metálico a fin de que saliese redondo, con el mismo diámetro que el molde que me serviría para emplatar el arroz). (Personalmente, me gusta con la yema dura?lo dejé un poco liquida, aunque no se aprecia bien en la foto).
Para emplatarlo:
Echar el arroz en un molde, colocar los plátanos fritos alrededor, junto con la salchicha, el huevo encima y regar con el tomate frito?..
¡¡ Buen provecho !!
Y al igual que el gran poeta andaluz Federico Garcia Lorca, que durante su estancia en Cuba (7 de marzo y el 12 de junio de 1930) escribió a sus padres:
"Esta isla es un paraíso. Cuba. Si yo me pierdo, que me busquen en Andalucía o en Cuba", si me pierdo?.si no me encuentran en Málaga, búsquenme en Cuba.