600 g de lomos de bacalao
100 g de harina de trigo
200 ml de agua muy fría
1 cucharada de bicarbonato
2 cucharadas de pimentón dulce
Sal
Pimienta
Aceite para freír
Empezamos cortando los lomos de bacalao en bastones de unos dos centímetros de grosor y reservamos. Preparamos la tempura, para lo cual mezclamos la harina y el bicarbonato con el agua y vamos batiendo hasta conseguir una mezcla homogénea y con la apariencia de una papilla algo líquida. Iremos añadiendo un poco más de agua o de harina según vayamos viendo que necesitamos una mejor textura. Incorporamos la sal, la pimienta y el pimentón y lo integramos todo muy bien.
Ponemos a calentar aceite y cuando esté muy caliente vamos sumergiendo los pedazos de bacalao en la tempura. Freímos unos dos o tres minutos, hasta que veamos que la superficie está dorada y los pasamos a una fuente con papel secante para retirar el exceso de aceite.
Servimos acompañado de una salsa, limón o simplemente así. Yo, como podéis ver en la foto, lo he acompañado con una guarnición de patatas fritas y calabacín, aprovechando que estamos en temporada. Fácil, ¿verdad?