La memoria es un libro de recuerdos donde pintamos y despintamos nuestras vivencias y a nuestros seres queridos.
Con el paso del tiempo se van yendo nuestros mayores, es ley de vida, se pierden incluso los lugares donde transcurrieron los momentos de nuestra infancia y juventud, sentimos algunas veces que el pasado se esfuma, que los colores, aromas y sabores de antaño ya no retornarán, los hijos crecen, se hacen mayores y emprenden su camino.
Pero los caminos de la vida son infinitos y aunque parezca increíble internet hoy en dia se ha convertido en una gran carretera donde te puedes cruzar con personas a la que no esperabas, a las que con el paso del tiempo a pesar de la cercanía familiar no has llegado casi a conocer, una vía de encuentro y un gran lazo de unión entre las personas.
A pesar de que intento guardar celosamente mi intimidad por esos caminos, he tenido la oportunidad de reencontrarme con una parte de mi familia, sobre todo con mis primos, que debido al tiempo, la distancia y nuestra dinámica de vida, solo hemos podido vernos en contadas ocasiones y en momentos nada agradables en nuestras vidas.
Hace poco más de dos años que comencé a escribir éste blog, nació “Mi cocina” virtual, me fui adentrando en otras cocinas, visitando otros fogones y admirando sobre todo el mundo “dulce”, la pastelería, a verdaderas artistas que con sus manos e imaginación preparan más que pasteles verdaderas obras de arte dignas de exposición en museos infantiles.
Uno de esos blogs, quizás por ser malagueño y por sus pasteles tan artisticamente decorados me llamó poderosamente la atención: Cocina dulce de los Mol, su autora es Lidia , una persona encantadora que también cocina de maravilla, nada más hay que ver su sabroso blog de recetas de cocina, ¿quién me iba a decir a mi que tenemos los mismos origenes, que es parte de mi familia?
Gracias a éste maravilloso reencuentro virtual estoy más cerca de sus padres (mis primos) y mantengo vivo aún más si cabe el cariño a mi tio Antonio y a mi tia Carmelita (sus abuelos). Lo descubrimos hace unos dias, nos hizo feliz.
Quiero dedicarle, humildemente a toda una maestra pastelera, esta entrada, éste bizcocho y desde mi cocina, que es su cocina, dejar constancia de mi admiración esta artista malagueña (además pinta de maravilla): Lidia (de los Mol).
¿Cómo hice éste cremoso y rico bizcocho?
Precalentar el horno a 180º C
Engrasar con mantequilla el molde.
Batir 150 gramos de mantequilla a temperatura ambiente, seis cucharadas soperas de leche de coco (se puede encontrar en cualquier gran superficie, en lata), cáscara rallada de un limón y 100 gramos de azúcar hasta que esté cremosa la mezcla.
Añadir tres huevos, uno a uno sin dejar de batir.
Tamizar 110 gramos de harina con levadura y remover hasta que esté bien mezclado.
Agregar 60 gramos de coco rallado y mezclar bien
Echar la masa en el molde y hornear unos 25 minutos, hasta que se dore.
Para comprobar que está listo pueden insertar un pincho de madera en el centro y debe salir limpio,
Desmoldar cuanto esté frio por completo.
No dejen de visitar los blogs de los Mol: http://cocinadulcedelosmol.blogspot.com/ y http://cocinasabrosadelosmol.blogspot.com/
¡¡ No es pasión familiar !!