Si todavía no has probado el bizcocho de leche condensada debes hacerlo lo más rápido posible, te prometo que resulta un gran placer para todos los sentidos, repetirás seguro. Este bizcocho queda muy tierno por lo que se conserva perfectamente varios días, eso si no desaparece en cuanto lo saques del horno, puedes servirlo para desayunar, como postre o en la merienda, y si tienes niños no quedarán ni las migas.
Ponte el delantal y acompáñame a la cocina.
BIZCOCHO DE MANZANA Y LECHE CONDENSADA
INGREDIENTES:1 manzana (grande)
370g de leche condensada (1 bote pequeño)
200g de harina de repostería
2 sobres de gaseosas dobles
150ml de aceite de girasol
10g de azúcar avainillado
3 huevos
azúcar moreno (para espolvorear)
PREPARACIÓN:
Engrasar o forrar un molde con papel sulfurizado.
Precalentar el horno a 180º.
Mezclar la harina con los sobres de gaseosas y tamizar.
Batir los huevos, añadir la leche condensada, el aceite y el azúcar de vainilla. Batir nuevamente hasta mezclar bien todos los ingredientes.
Incorporar la harina, por tandas, removiendo constantemente hasta lograr una masa sin grumos.
Pelar y descorazonar la manzana, cortarla en rodajas finas con ayuda de una mandolina.
Vaciar la crema en el molde, repartir las láminas de manzana por toda la superficie. Espolvorear con azúcar moreno.
Hornear 30/35 minutos (depende de cada horno).
Retirar y dejar sobre una rejilla.
Con este bizcocho casero los tuyos quedarán encantados, no dejes pasar la oportunidad de hacerlo ¿Has visto lo fácil que es?
Alicia ha preparado «Bizcocho de leche caliente» una delicia para tomar en cualquier momento del día, tienes que probarlo si o si.
Para poner punto y final a este post te ofrezco un «Bizcocho de leche condensada con topping de fresa y chocolate».