200 g de requesón.
125 g de harina.
100 g de harina de maíz.
Ralladura de una naranja.
170 ml de zumo de naranja.
2 huevos.
70 ml de aceite de girasol.
1 sobrecito de levadura química.
125 g de azúcar glass.
Para el glaseado:
1 taza de azúcar glass
2 o 3 gotitas de agua de azahar.
Agua.
MODO DE HACERLO EN OLLAS GM:
Ponemos en un bol los huevos, el jugo de naranja, el requesón, los huevos y el zumo y la ralladura de la naranja, batimos con minipimer hasta que no queden grumos del queso y esté bien integrado todo.
En otro bol ponemos la harina, la harina de maíz, la levadura y el azúcar, mezclamos bien y vamos añadiendo los líquidos batiendo con batidora de varillas hasta obtener una masa suave.
Ponemos en el fondo de la cubeta una lámina de silicona y forramos con papel de horno enmantequillado, echamos la mezcla y programamos para la G menú pastel y para los modelos E y F menú horno, 45 minutos, 140º , tapa puesta y válvula abierta.
En los últimos 5 minutos ponemos la tapa doradora a 175º y doramos el bizcocho.
Sacamos la cubeta y dejamos templar dentro. Desmoldamos.
Ponemos el bizcocho sobre una rejilla y preparamos la cobertura mezclando el azúcar glass con las gotas de azahar y el agua, removiendo y añadiendo agua muy poco a poco, hasta obtener una masa consistente que echaremos por encima del bizcocho cuando ya esté frío.
MODO DE HACERLO TRADICIONAL:
Ponemos en un bol los huevos, el jugo de naranja, el requesón, los huevos y el zumo y la ralladura de la naranja, batimos con minipimer hasta que no queden grumos del queso y esté bien integrado todo.
En otro bol ponemos la harina, la harina de maíz, la levadura y el azúcar, mezclamos bien y vamos añadiendo los líquidos batiendo con batidora de varillas hasta obtener una masa suave.
Precalentamos el horno a 180º.
Preparamos un molde, que no sea desmoldable ya que la masa es muy líquida, untándolo con mantequilla y echamos la masa.
Metemos en el horno durante 40/45 minutos. Pinchar antes de sacar.
Dejamos templar fuera del horno.
Preparamos la cobertura mezclando el azúcar glass con las gotas de azahar y el agua, removiendo y añadiendo agua muy poco a poco, hasta obtener una masa consistente que echaremos por encima del bizcocho cuando ya esté frío.