Y algunos pensarán...
¡Ya era horita Churretosa! Jajaja.Sí, todo un descanso blogueril el de este verano y todo para volver con fuerzas renovadas e intentar deleitaros con bocaditos como estos Bombones de cocholate blanco rellenos de gelatina de fresa.
No he podido empezar mejor tras mi vuelta de vacaciones, con la cocina patas arriba eso sí, pero encantada de ser la elegida para el asalto de este mes en el #AsaltaBlogs.
Así que, aunque algunos de vosotros ya habéis desmantelado mi despensa (no creáis que no lo he notado), intentaré en estos días engrosar mi recetario para que los más rezagados (y no miro a nadie Capitán Rábano) tengan más donde elegir para urdir su robo.
Y es que la vuelta me esta costando Churretos@s, ando un poco perdida buscando la "musa" esa que dicen que tienen los artistas, jajaja, que no es que me esté comparando yo con un gran pintor, músico o escultor, pero me gusta pensar que mis dulcetes son pequeñas creaciones comestibles hechas, si no con arte, al menos con mucho cariño.
Y, aunque está todo inventado (o casi todo) y no me pueda poner medallas de ser super creativa, lo cierto es que la poca inspiración necesaria para dar mi toque personal a las recetas que caen en mis manos parece haberse volatilizado... ¿Será que se ha evaporado con estos calores?
He recurrido incluso a mi "libreta de las grandes ideas", una en la que apunto todo lo que se me pasa por la cabeza susceptible de combinar bien o ser convertido en dulce (de ella han salido cosas como Layer Cake de Profiteroles), pero nada... ¡no hay forma de que salga algo en condiciones!,más bien desastres como un merengue frito que intenté hace unos días y que no estoy dispuesta a contaros... ¡Ups!, creo que ya lo he hecho, jajaja.
BOMBONES DE GELATINA
1 sobre gelatina de fresa
400 gr agua
200 gr cocholate blanco de cobertura
1 lámina de chocotransfer (opcional)
Molde redondo silicona 2.5 cm diámetro con varios compartimentos (pero no me seáis "borricos", que sirve cualquier otro molde de silicona que tengáis, que luego decís que no lo hacéis porque no tenéis el molde... no hay escusa)
Bombón decorado con chocotransfer, cuenco de cocholate pequeño (con molde de 2,5 cm) y grande (con molde de magdalenas) para que veáis que existen diferentes opciones.
Para los bombones de gelatina
Gelatina de fresa: disolver el contenido del sobre en 200 gr de agua hirviendo y cuando esté disuelto añadir 200 gr de agua fría.
Esto es lo primero que haremos, necesitamos que la gelatina esté fría (aunque todavía líquida) para que no se derrita el cocholate el rellenar el bombón.
Para hacer el bombón: derretir 2/3 del cocholate en el micro a baja potencia y en intervalos de 15-20 segundos, moviendo y vigilando que no se nos queme.
Picar finamente el otro tercio de cocholate y añadirlo al cocholate derretido para que baje su temperatura.
Mover durante unos minutos con ayuda de una espátula para que se enfríe (lo suyo sería tener un termómetro y mover hasta bajar la temperatura a 29º C).
Si queremos decorar los bombones con chocotransfer es el momento de ponerlo sobre el molde.
Recortar la lámina con la forma del fondo de nuestro molde y colocar con la parte rugosa, que es la que lleva el dibujo, hacia arriba para que al contacto con el cocholate derretido se quede el dibujo estampado en él. Es sólo decorativo, por lo que es opcional.
Rellenar nuestros moldes de silicona con el cocholate, hasta arriba del todo y luego volcar el molde sobre un cuenco para retirar el excedente de cocholate.De esta forma, se nos quedará toda la cavidad cubierta por el cocholate, pero dejando hueco para el relleno.El cocholate que recogemos en este proceso lo reutilizamos.
Esperar a que se solidifique, si queremos acelerar el proceso introducir en el frigorífico.
Verter la gelatina fría en la cavidad hasta cubrir un poco más de 2/3 y dejar unas horas en el frigorífico hasta que tome la consistencia deseada.
Podemos terminar así el proceso y obtener unos cuencos de cocholate rellenos de gelatina la mar de monos o volver a derretir cocholate y cubrir con otra capa para hacer un bombón.
Cuando nuestra cocholatina este solidificada, sacar del molde y quitar el plástico del chocotransfer en caso de haberlo utilizado.
Existen tantas posibilidades como se nos ocurran... de cocholate negro y gelatina de naranja, cocholate blanco y gelatina de limón o de kiwi.
Podemos usar moldes de silicona rectangulares, con forma de corazón, teñir el cocholate blanco y decorar con formas como hice en estas Cocholatinas o sustituir el chocotransfer por decoraciones de azúcar (fideos o bolitas de colores)... el caso es que no hay escusa para no hacerlos.
Por cierto... aviso que Doña Pitu ha vuelto de EEUU, y con ella seguramente sus críticas.
Todavía no la he visto, típico de ella tener otras cosas que hacer antes de ver a su hermanita (habrá que quererla igual, jajaja) y como hoy es su cumple (aunque en su carné ponga que es en Agosto por un error administrativo y ella se aproveche celebrándolo 2 veces), quiero desearle ¡Feliz Cumpleaños!
A la pregunta que os estáis haciendo todos, incluida Doña Pitu ¿hay tarta? la respuesta es NO, pero no os preocupéis que cuando la señorita tenga a bien aparecer de visita la habrá.
Nos vemos pronto Churretos@s.
Besos.
Raquel