Ingredientes: Para el praliné:
150gr de avellanas tostadas 125gr de azúcar Para el chocolate: 200gr de chocolate negro 100gr de chocolate con leche 75gr de mantequilla un chorrito de leche
Para el praliné se pone en un cazo el azúcar a fuego medio hasta que se derrita y coja un color rubio, en ese momento se le añade las avellanas y se le da vueltas con una cuchara de palo para que se impregnen todas las avellanas, sacar del fuego y extender esta masa sobre un papel de horno y dejar enfriar.
Cuando esté cuajado y completamente frio trocear y machacar un poco en un mortero, picar esta pasta en una picadora o batidora hasta que esté completamente triturada y le haya salido el aceite de las avellanas, se quedará una pasta compacta pero húmeda, dejar reposar.
Derretir el chocolate al baño maría con la mantequilla, 50gr para el negro y el resto para el chocolate con leche, si se quiere el bombón relleno de praliné hay que rellenar los huecos de los moldes de bombones con el chocolate, darle unos golpecitos sobre la encimera para que se rellenen los huecos de aire que pueda quedar, dejar en la nevera 3 minutos y sacar y volcar para vaciar el resto del chocolate que se ha quedado sin cuajar y que solo se queden las paredes de esos huecos con una fina capa de chocolate.
Poner un poco del praliné en cada hueco y con otro poco de chocolate tapar y sellar esos bombones con una espátula.
Retirar el resto del chocolate para que quede lo más plano posible.
También se puede mezclar el chocolate con la pasta de praliné e ir poniendo esta pasta en los moldes, igualmente alisar con una espátula y retirar el exceso de chocolate. Poner en la nevera 5, o, 6 horas, cuanto más tiempo de enfriado más seguridad de que estén bien hechos.