El brownie es un bizcocho de chocolate típico de la gastronomía de Estados Unidos. El primer brownie se hizo en 1896 y fue un fallo del cocinero al que se le olvidó echar levadura en el bizcocho de chocolate que estaba preparando. Por eso el brownie original se elabora con chocolate, nueces y sin levadura.
Hay infinidad de recetas de brownies, de hecho, yo he compartido con vosotros algunas como el brownie blanco con nueces de Macadamia, el brownie de chocolate blanco, croissants y confitura de fresas, el brownie de Nocilla, el brownie con granola y los brownies.
Los ingredientes que vamos a necesitar son los siguientes:
100 g de harina
50 g de cacao en polvo
1/2 cucharadita de levadura
300 g de remolacha
3 huevos
100 g de mantequilla
Creo que fue la cocinera repostera británica Nadiya la que comentó que lo que había que hacer es sustituir el azúcar por remolacha y eso es lo que vamoa a hacer. Esto hará que nuestro dulce sea apto para diabéticos. La remolacha que vamos a utilizar en esta receta es cocida y rallada. Este ingrediente va a hacer que el sabor a cacao sea más intenso y el color más oscuro.
La mantequilla va a ser sin lactosa por lo que también lo podrán comer las personas que tengan problemas con ella.
Elaboración:
Forramos un molde rectangular de 19,5x25,5 cm y precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.
Colocamos la remolacha sobre un colador o tamiz que hemos puesto sobre un bol. A continuación, colocamos la mantequilla en un cazo que ponemos al fuego hasta que la mantequilla esté derretida. Mientras, tamizamos la harina junto con el cacao y la levadura introduciéndolos en un bol grande. Añadimos el resto de los ingredientes en el cuenco. Mezclamos con unas varillas hasta obtener una masa homogénea. Lo podemos hacer con ayuda de un procesador de alimentos.
Vertemos la masa en el molde, lo llevamos al horno a una altura media-baja y horneamos durante 25 minutos.
Retiramos del horno y dejamos que se enfríe sobre una rejilla antes de desmoldar.
Presentación:
Cortamos el brownie, servimos en platos de postre ¡y a disfrutar!
¿Qué te parece esta receta? Unos bocados de bizcocho tierno con un sabor y aroma muy intenso a cacao. Lo podemos acompañar de un buen café.
Bon appétit!
Fuente: este post proviene de Pequeños Accidentes, donde puedes consultar el contenido original.
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