La masa se bate lo menos posible para no aportarla aire y así la miga será más compacta aunque igual de esponjosa que los cupcakes.
Y todo este rollo para deciros que sí, que estos muffins están mega riquísimos. La mezcla naranja-chocolate negro es perfecta.
Ingredientes (12 unidades)
300 gr. de harina
110 gr. de azúcar
2 cucharaditas de levadura
1/2 cucharadita de extracto de vainilla
80 gr. de aceite de girasol
170 ml. de leche
2 huevos tamaño L
Ralladura de naranja (a gusto)
100 gr. de chips de chocolate y unos poquitos más para adornar
Precalentamos el horno a 200º (calor sólo por abajo).
Tamizamos la harina y la levadura y reservamos.
Batimos los huevos y el azúcar hasta que quede una mezcla espumosa. A continuación añadimos la leche, el aceite, el extracto de vainilla, y la ralladura de naranja y mezclamos bien.
Vamos incorporando poco a poco la harina. Cuando la mezcla quede homogénea añadimos las chips de chocolate y mezclamos bien con la ayuda de una espátula.
Preparamos una bandeja con 12 cápsulas y las llenamos las 3/4 partes de su capacidad y echamos unas chips de chocolate por encima.
Horneamos 10 minutos con calor sólo por abajo y otros 10 minutos, calor arriba y abajo.
No diréis que no son fáciles de hacer... Y el resultado os aseguro que os va a encantar y si hay niños en casa os van a durar un suspiro (lo digo por experiencia).
Ya me contaréis qué tal ¿vale?