En alguna época de mi vida esta ensalada era casi que única y exclusivamente de lo que me alimentaba y eso por que diréis vosotros.
Pues haber como os cuento, hace mucho tiempo existían 2 estudiantes universitarias que vivían solas en un piso que sus padres dejaban por largas temporadas.
Los primeros días, las hermanitas comían como cualquier hijo de familia, quiero decir "comida decente", si señoras y señores esa comida deliciosa y bien preparada que tu padre y tu madre dejan en el frigorífico para que sus pequeñinas tengan unos días de balanceada y deliciosa alimentación, pero pasados unos días el banquete desaparecía y ahí comenzaba el dilema, quien y que preparar? a que hora si tenemos que estudiar? (esto puede sonar a excusa... o a pretexto??) y entonces decidíamos llamar al chino: "dos cajas de Chop Suey y dos de Chow fan por favor..." ( dos de una vez, para no tener que estar llamando) y como llegaban cajas grandes y llenas, comíamos y cenábamos el menú chino y al siguiente día comíamos y cenábamos el menú chino y al siguiente día comíamos y cenábamos el menú....... y así pasaban los días hasta que los últimos días el frío del frigorífico ya tenia secas cada una de las cajas y sus contenidos, los últimos días la comida sabía a cartón.... pero así seguíamos hasta que se acababa, al siguiente día comíamos en la Universidad luego el sábado pedíamos una pizza, el domingo ya nos dábamos un gusto y comíamos por ahí, pero luego llegaba el lunes y que hacíamos? para que discutir sobre lo que ya sabíamos? para que pensar...... "aló? restaurante chino?... Si por favor, dos cajas de Chop suey y dos de Chow Fan" y así durante no se cuanto tiempo de manera consecutiva habían sendas cajas de cartón cuyo contenido era la base de nuestra alimentación... y así vivíamos hasta que por fin después de varios meses volvían nuestros padres y volvíamos a comer comida de nosotras tanto añorábamos.
Ha coincidido esta receta con unas palabras que me he escrito en estos días con una amiga de infancia, cuyo padre chino tenía un restaurante en donde pasé unos momentos formidables de mi juventud. El Señor Fang fue un hombre especial, lo recuerdo con aprecio, por muchos detalles especiales que tuvo conmigo.
Un vez, ya yo con 18 años he llegado a su restaurante a visitar a sus hijas y hemos iniciado una charla sobre la vida de repente se levanta y me sirve un whisky le dije que me sorprendía su ofrecimiento por que nunca lo había hecho y el me dijo: "Esta botella solo la comparto con personas especiales, lleva mucho tiempo guardada, !! toma.. toma!!" todo esto con un mal español pero totalmente comprensible. Me halagaron inmensamente sus palabras, siempre me dijo que le gustaba que fuéramos amigas (mi hermana y yo) de sus hijas y eso me hacia sentir bien, viniendo de un hombre poco expresivo y de muy pocas palabras pero con un corazón grande.
Es por esto que con esta receta que por supuesto no le llega ni a los tobillos a la que el Sr. Fang preparaba, rindo un homenaje a un padre que siempre fue muy especial con nosotras.
Ingredientes:
1 Zanahoria
1 Pimiento rojo
1 Cebolla
1 puerro
1 Calabacín
1/2 repollo blanco
Brotes de soja
30 ml soja
300 ml caldo de carne
1 cucharada de Maicena
200 gms de carne de cerdo
250 gms de gambas peladas
Sal y aceite
Huevos de codorniz para decorar
Semillas de Sésamo para decorar (opcional)
Preparación:
Picar en julianas todos los vegetales, cortar en cuadros la carne.
En una sarten grande, poner una cucharada de aceite a calentar, saltear la carne en cuadros un minuto por lado y lado y retirar, saltear por un par de minutos las gambas y retirar.
En la misma sarten en 3 cucharadas de aceite agregar las verduras ya picadas y saltearlas por unos 10 minutos.
Mezclar muy bien y dejar cocer por unos 5 minutos para que se haga la salsa, agregar la sal y servir caliente y adornar con huevos de codorniz hervidos. Yo he rebozado los huevos de codorniz en pan con perejil y los he freido, todo esto muy suave, en mi país los restaurantes chinos lo hacen muy bien y suelen adornar la ensalada de esta manera.
Fuente: este post proviene de De Cabeza en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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