Espero que la noche de ayer fuera genial y para celebrar el día de hoy, ¿qué mejor que con una coca de San Juan? Tengo que confesar que el año pasado intenté hacer esta coca, y yo no sé que hice, pero salió de todo menos coca. Así que este año no estaba yo muy convencida... Pero bueno, el resultado puede considerarse como positivo, se trata de hacer la receta poco a poco, con tiempo, con paciencia y con tranquilidad. En este caso, la coca es la más sencillita que se puede hacer, ¿el motivo? En casa no nos gusta ni el cabello de ángel ni la fruta confitada ni la crema pastelera... Así que la coca será de piñones y azúcar.
¡Así que ánimos y vamos allá!
Coca de San Juan
Ingredientes:
300h de harina de fuerza (especial para hacer panes, brioches, cocas...)
55g de azúcar blanquilla
55g de mantequilla a temperatura ambiente
2 huevos a temperatura ambiente
20g de levadura fresca o el equivalente de levadura seca de panadería
75g de leche
1 cucharadita de canela en polvo
1/2 piel de limón rayado
Piñones al gusto
125ml de anís
Una pizca de salElaboración:
Calentamos un poquitín la leche y deshacemos la levadura. Hay que tener paciencia porqué tarda en deshacerse, pero hay que hacerlo con paciencia, no puede quedar ni un grumito.
Añadimos tres cucharadas de la harina que tenemos y lo trabajamos hasta que tengamos una masa bien lisa.
Lo tapamos con un trapo y dejemos que repose hasta que haya doblado su volumen.
Mientras, trabajamos con el resto de harina, los huevos, el azúcar, la pizca de sal, la piel de limón y el anís. Se puede hacer con un tenedor, con un batidor manual o con el robot de cocina. Si utilizamos el robot de cocina, tenemos que ponerle el brazo especial para hacer masas y ponerlo al mínimo de velocidad.
Luego, cuando la primera mezcla haya doblado su volumen, lo añadimos al resto de ingredientes y seguimos amasando hasta que tengamos una masa bien lisa y de color uniforme.
Para saber si la textura de la masa es la correcta utilizaremos el mismo truquito que con las galletas, si tocamos la masa y esta pegasoja significa que necesita un poco más de harina. La masa tiene que poder estirarse con un rodillo sin que se pegue al mismo.
Estiramos la masa sobre una placa de horno hasta que tenga un centímetro de grueso más o menos (recordemos untar la placa con aceite o mantequilla o forrarla con papel de horno).
Pintamos la masa con huevo batido o con leche (yo lo hice con leche y me gustó mucho el resultado) y la dejamos reposar tapada con un trapo hasta que doble el volumen.
Cuando haya doblado su volumen, le añadimos los piñones que queremos y le tiramos por encima más azúcar blanquilla (no tengáis miedo en pasaros)
Y lo horneamos unos 20 minutos a 180°C.
¡Y ya tenemos nuestra súper coca de San Juan!
¿?
No tengáis prisa, cuando le toque reposar a la masa, dejadla reposar un buen rato.
Si hay que dejar reposar la masa hasta que doble su volumen, creedme, se nota cuando crece.
Judith.