Ingredientes:
500 gramos de harina de fuerza.
190 mililitros de leche.
150 gramos de azúcar.
2 huevos.
60 gramos de levadura fresca.
100 gramos de mantequilla en pomada.
8 gramos de sal.
Ralladura de limón.
Para la crema:
500 mililitros de leche.
125 gramos de azúcar.
40 gramos de harina de maíz.
4 yemas de huevo.
Canela en rama.
Ralladura de limón.
40 gramos de mantequilla.
Elaboración:
Comenzamos elaborando la crema de relleno. Para ello ponemos a hervir la leche junto a la canela y la piel de limón. Una vez hervida la colamos y cuando atempere vamos añadiendo (muy despacio y sin dejar de remover) las yemas que previamente habremos batido muy bien junto al azúcar. Cuando esté todo bien integrado añadimos la harina de maíz disuelta en un poco de leche y llevamos toda la mezcla al fuego hasta que espese. Reservamos.
Con nuestra crema ya lista comenzamos a preparar la coca. Lo primero que debemos hacer es poner en un bol la harina en forma de volcán. En el centro añadimos los huevos, el azúcar, la sal, la ralladura de limón, la mantequilla y la leche (reservando un poquito de ella). Mezclamos bien. Seguidamente añadimos la levadura que habremos disuelto en la leche reservada y amasamos durante al menos 20 minutos, hasta lograr una masa manejable que dejaremos reposar hasta que doble su volumen. Cuando haya levado extendemos bien la masa con las manos, colocamos sobre ella la crema pastelera y replegamos una mitad de la masa sobre la otra (como si fuese una empanadilla). Espolvoreamos con azúcar de forma generosa y, esto es opcional, con piñones (yo los piñones los puse a mitad de horneado para evitar que se quemasen). Horneamos a 180 gramos hasta que esté bien doradita y listo.