Normalmente, como supongo que sucede en muchos hogares, me cuesta un montón que el peque coma verduras... Pero el caso es que la coliflor le encanta, debe ser por su sabor suave, casi neutro, por lo que la bechamel y el jamoncito picado le dan ese toque sabroso que hace que siempre me pida repetir!
Ingredientes:
- 1 coliflor mediana
- 40 gramos de mantequilla
- 80 gramos de harina
- 500 ml de leche
- Sal y pimienta
- Taquitos de jamón
- Queso rallado para gratinar
Elaboración:
1. Separamos los arbolitos de la coliflor y los pasamos por el grifo.
2. Los ponemos en una olla con abundante agua y un poco de sal y los dejamos cocer hasta que estén tiernos (si os preocupa el olor al cocer, podéis añadir un chorro de leche en el agua para mitigarlo).
3. Colamos la coliflor y reservamos en una fuente para horno.
4. Mientras, fundimos la mantequilla en un cazo y agregamos la harina. La cocinamos unos minutos para quitarle el sabor a crudo, durante unos minutos. Sazonamos al gusto.
5. Añadimos toda la leche de golpe (mejor si está tibia o a temperatura ambiente) y cocinamos sin dejar de remover hasta que espese.
6. Vertemos sobre la coliflor y repartimos los taquitos de jamón y el queso rallado.
7. Gratinamos unos minutos en el horno y servimos.