Solo quería que pasaran aquellas horas en blanco y que llegaran los exámenes
La suerte estaba echada
Ya está. solo queda esperar. Será un martirio hasta que salgan los resultados, pero sabe que ha hecho todo lo que estaba en su mano
Y recibe una llamada. Inesperada. Sin sentido, al principio
Después de tantos años, una vieja amiga se cuela de nuevo en su vida
Le habla de los exámenes. Ella también estaba allí. Ella esta del otro lado. Del lado de los que inclinan la balanza. Está entre los examinadores
Le han llegado rumores de su situación personal, dice
La escucha decir que siempre la ha tenido por una buena profesional, comprometida con el trabajo. Dice que no se merece todo lo que le ha pasado. Que ella le puede ayudar. Otros compañeros le deben favores, se puede cobrar alguno. Lo hará por los buenos tiempos y porque sabe que su situación es apurada y difícil. Solo quiere ayudarla
Le dice que si le resulta violento lo que le está proponiendo, no pasa nada, tan amigas...
Sabe que perdió el piso, que no se merece estar trabajando en aquel supermercado y en aquellas condiciones
Sigue tejiendo su tela de araña
Nadie te conoce, nadie sospechará
No le habla de sus exámenes. No le dice sus notas
Preguntárselo significaría que no lo ve claro, que no acepta su proposición, una oportunidad directa de cambiar su vida
Se acabaron los turnos interminables por cuatro duros, el piso de alquiler diminuto. Podría volver a tener todas sus cosas con ella, sus libros, todo y no tenerlos pudriéndose en un guardamuebles
A pesar de todo, necesita pensar, necesita reflexionar
Si le dice que no, se cerrará todas las puertas para siempre y no sabe si tiene fuerzas para seguir luchando en aquellas condiciones
si acepta, estará en aquella tela de araña difícil de salir, en una red de pequeños favores apenas perceptibles. Les deberá todo a aquella gente. A su amiga y a los amigos de su amiga dentro de la administración
Su amiga habla y habla, tratándola de convencer
Y a ella, el alma de le encoge
Cuando por fin cuelga el teléfono, la decisión ya está tomada
Lo que más rabia le da, es que nunca sabrá su auténtica nota
Y deja la conciencia aparcada, de momento
Nota: Segunda parte del relato que acompaña la receta de BIZCOCHO ESPECIADO CON FRUTOS SECOS EN HORNO
INGREDIENTES
1 conejo troceado
500 ml de moscatel
4 chalotas
Hierbas provenzales
Romero
Aceitunas negras y verdes, sin hueso
Aceite
Sal
Pimienta
ELABORACIÓN
En un bol grande, poner el conejo salpimentado, espolvoreado con hierbas provenzales y con el moscatel
Remover
Dejar marinando toda una noche
Pelar las chalotas y cortarlas en cuatro
Escurrir el conejo, reservando la marinada
Poner el conejo en un molde de aluminio redondo (ver la imagen más abajo)
Añadir las chalotas por encima
Salpimentar
Espolvorear con romero y con hierbas provenzales
Añadir las aceitunas
Añadir un chorreón de aceite
Menú Horno 40 con válvula abierta + tapa abierta
Cada 7-8, ir regando con la marinada
Pasado el tiempo de horno, retirar la tapa y colocar la Tapa Horno
Dorar al gusto
Receta adaptada de Cuisine et mets