Al abrir la puerta de mi cuarto, para acudir a la llamada, lo huelo y mascullo “por lo bajini” mi decepción. El apio se delata con claridad en el ambiente.
Seguro que todavía te acuerdas de cuando odiabas las cremas de verduras!
Ahora soy una fan total de las cremas de verduras, tan diferentes unas de otras, tan suaves, tan reconfortantes, tan sanas…
Ingredientes:
300 gr. de calabaza
1/2 cebolla.
1 puerro.
3 ramas de apio.
150 gr. de garbanzos cocidos
Coliflor.
Orégano y comino.
1 litro de caldo de verduras.
Harina y aceite de oliva.
sal y pimienta.
Lavamos la coliflor y separamos unas flores. Reservamos mientras se secan sobre papel de cocina.
En una cazuela ponemos tres cucharadas de aceite y rehogamos en el la cebolla, el apio y el puerro cortados para sofrito.
Cuando hayan perdido la tersura añadimos la calabaza cortada en dados de 2 centímetros más o menos, el comino, el orégano, algo de sal y le damos unas vueltas.
Cinco minutos después agregamos a la cazuela los garbanzos cocidos y removemos. Dejamos cocinar todo junto durante cinco minutos más.
Añadimos a la sartén el caldo de verdura, tapamos la cazuela y dejamos evolucionar, a fuego lento, durante 10 minutos más.
Hacemos una masa de rebozar con 2 cucharadas de harina y medio vasito de agua y rebozamos en ella las flores de coliflor.
En una sartén, con abundante aceite, vamos friendo a fuego vivo las flores de coliflor. Cuando estén doradas, las vamos sacando a un plato, con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite, hasta que estén todas fritas.
Pasamos por una procesadora el contenido de la cazuela hasta que esté todo bien unificado y tengamos una crema fina. Probamos la sazón y rectificamos si fuera necesario.
Servimos bien calentita, en platos o cuencos, un par de cazos de crema y 3 o 5 flores de coliflor (según sean de grandes).