Hoy os traigo una riquísima crema de mandarina sin azúcar, similar a la crema pastelera pero con mandarina. Vamos, que al final se come igual que unas natillas. Es una receta súper rica y fácil de hacer, y buena para personas con diabetes, ya que la mandarina es un cítrico buenísimo para personas con esta condición, apenas lleva harina y el aporte glicémico es bajo.
Me he inspirado en la crema de mandarina de Eva Arguiñano, pero le he hecho algunas modificaciones para que la podamos disfrutar todos. Además, al final os dejo también una sugerencia de presentación para Halloween muy original
¡Vamos con la receta!
Ingredientes:
6 mandarinas
Otra mandarina (para rallar la piel)
3 yemas de huevo
1 cucharada de harina de maíz
25gr de stevia granulada
Pasos a seguir:
1. Cortamos la parte de arriba de 4 mandarinas, como se muestra en la foto. Con cuidado, sacamos los gajos de dentro de la mandarina, sin romper la piel, ya que éstos serán nuestros recipientes: las mandarinas vacías. Para que no se te rompan, yo te recomiendo usar una cucharita, e ir metiéndola poco a poco entre la piel y los gajos, hacia abajo. Una vez quites el primer gajo con los dedos, el resto saldrán fácilmente. Sé paciente y ve poquito a poquito
2. Con los gajos que hemos sacado de las 4 mandarinas y 2 mandarinas más, hacemos zumo y lo colamos.
3. En un bol, mezclamos la harina con la stevia y un chorrito de zumo. Añadimos las yemas y batimos bien con unas varillas.
4. Ponemos el resto del zumo colado y la ralladura de media naranja en un cazo a fuego medio (si pones más quedará un sabor más intenso, pero también más amargo). Cuando esté caliente, añadimos la mezcla de harina, stevia y huevos que habíamos preparado, y mezclamos bien.
5. Cocinamos la mezcla hasta que espese. Ve removiendo constantemente para que no se pegue al fondo del cazo.
6. Servimos la crema en los cuencos de mandarina que hemos hecho al principio, dejamos enfriar un par de horas en la nevera, ¡y voilà!
La verdad es que esta crema de mandarina es un postre súper sencillo de hacer, muy rico, y entra genial después de cualquier comida.
Y como os comentaba, también podemos servir esta crema especialmente para Halloween. Yo lo que he hecho ha sido coger un rotulador y pintar la mandarina como si fuera una falsa calabaza de Halloween, y queda muy original
Eso sí, os aconsejo utilizar un rotulador permanente/indeleble si no queréis quedaros con la mano negra cuando os la comáis
Espero que os haya gustado esta receta, a mí me ha encantado compartirla con vosotros!
Puedes ver esta entrada Crema de mandarina sin azúcar (normal o para Halloween) en Dulces diabéticos.
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