Ingredientes:
Lonchas de jamón.
2 láminas de papel de horno.
Una bandeja de horno.
Algo que pese, como un recipiente apto para horno.
¿ Cómo lo hacemos?
Es bien fácil; colocamos sobre una bandeja para el horno un papel de horno y sobre éste las lonchas de jamón que queramos deshidratar.
Colocamos otra lámina de papel de horno encima y cubrimos todo con algo que paso, como una fuente para horno u otra bandeja.
Introducimos todo en el horno previamente calentado a 180º C, y dejamos deshidratar durante unos 15-20 minutos y ¡listo!, ya tenemos nuestro crujiente de jamón.
Consejos:
Estad atentos a vuestro horno, pues si el jamón se quema un poco dará un horrible sabor en donde lo coloquéis.
Podéis colocar el crujiente de jamón entero o darle golpes con una cuchara para obtener trocitos irregulares.