El caso es que me apetecía mucho hacerlos y saber qué tal era la experiencia. Y ya por fin puedo decirlo: me ha gustado mucho :) Sé que tengo que mejorar en muchos aspectos, pero creo que para ser los primeros no están mal. Ya me diréis vosotros qué os parece (con total confianza ¿eh?) que yo acepto todo tipo de consejos para ir mejorando poquito a poco en lo que voy haciendo.
Los cupcakes que he hecho son de chocolate con nueces, porque el chocolate aquí en mi casa gusta muchísimo, y la buttercream de plátano porque pensé que sería una combinación deliciosa junto con el chocolate. Y bien, después de haberlos probado puedo decir que así es, están bueníiiiiisimos jajaja.
No me enrollo más y me pongo ya con la receta :)
Para el bizcocho he seguido casi al pie de la letra una receta del blog de My world for a cup cake y a la buttercream siguiendo el principio básico de la misma, es decir mantequilla y azúcar glas, le he añadido solamente plátano. Y la verdad que el resultado ha sido muy bueno :)
Unidades: 10.
Ingredientes para el bizcocho:
140 gr. de azúcar blanca. (La de toda la vida).
115 gr. de harina.
100 ml. de aceite de girasol.
2 huevos (clase M).
90 gr. de chocolate para fundir.
70 ml. de leche.
1 cucharadita de levadura.
1 cucharadita de extracto de vainilla.
45 gr. de nueces.
Ingredientes para la buttercream:
250 gr. de mantequilla.
300 gr. de azúcar glas.
1 plátano.
Aclaración:
Puede que os salga de bizcochos para más cupcakes que de buttercream, ya que la receta del bizcocho original es para 12, pero la receta de la buttercream al ser hecha a "ojo" no he controlado demasiado bien las porciones (las cosas de la inexperiencia en este mundo). Pero no pasa nada, porque el bizcocho sin buttercream está igual de bueno jajaja.
Aclarado esto, ahora sí que vamos con la receta.
Comenzaremos haciendo los bizcochos. Para ello, pondremos el chocolate a fundir al baño María. Lo trocearemos para que el fundido sea más rápido y lo echaremos en un cazo. Removeremos de vez en cuando para ayudar a que se disuelva bien. Una vez esté fundido lo quitaremos del fuego y lo dejaremos templar.
Derretimos el chocolate y lo dejamos templar.
Consejo:
Si tienes microondas puedes fundirlo en él. Sólo tienes que echarlo en un recipiente y ponerlo unos segundos. Lo sacas, lo remueves y vuelves a meterlo otros segundos. Así hasta que esté completamente fundido. Pero cuidado con ponerlo mucho tiempo seguido sin removerlo porque se nos puede quemar.
A continuación en un bol echamos el azúcar y el aceite. Y batimos con unas varillas eléctricas hasta que ambos ingredientes estén bien integrados.
Batimos el aceite con el azúcar.
Luego iremos añadiendo los huevos, uno por uno. Así que echaremos el primero y lo batiremos todo hasta que sea homogéneo, y será entonces cuando añadamos el segundo. Batimos de nuevo hasta que se integre bien.
Batimos los huevos uno por uno.
Mezcla con los dos huevos integrados.
Una vez que esté todo bien batido, echaremos la levadura junto con la harina y tamizaremos la mitad de la mezcla sobre el bol anterior.
Tamizamos la harina con la levadura.
Cuando se haya mezclado bien, añadiremos la leche y el extracto de vainilla y seguimos batiendo. Ahora tamizamos el resto de la harina y batimos lo suficiente para que la masa que resulte no tenga grumos.
Echamos la leche y la vainilla.
Añadimos el resto de harina y removemos.
En el momento que todo esté integrado, volcaremos el chocolate fundido sobre la mezcla y seguimos removiendo para que el chocolate se reparta bien.
Echamos el chocolate fundido.
Repartimos bien el chocolate.
Para terminar nuestra masa del bizcocho sólo nos quedara picar las nueces al gusto (a mí me gusta bien picaditas para no encontrarme los trozos) y removerlo bien con la masa ya chocolateada.
Picamos las nueces.
Lo añadimos a la mezcla.
Debe de quedar una mezcla homogénea más o menos como la de la foto de abajo.
Masa del bizcocho con todos los ingredientes integrados.
Ponemos las cápsulas de los cupcakes en los moldes y los rellenamos con la ayuda de una cucharada de helado. Así nos aseguramos que todas las cápsulas tengan la misma cantidad. Eso sí, no la llenéis más de 2/3 de su capacidad o si no os subirán mucho y más que cupcakes parecerán magdalenas.
Llenamos las cápsulas un máximo de 2/3.
Cuando las tengamos rellenas, meteremos el molde al horno y lo tendremos allí durante 20 minutos a 180 º (previamente ya precalentado). Para saber si está hecho basta con meter un palillo y si sale limpio es porque ya están listos para sacarlos.
Horneamos 20 minutos a 180 º.
Aprovecharemos mientras se hace el bizcocho para ponernos a elaborar la buttercream de plátano. Tendremos que echar en un bol la mantequilla a punto de pomada, es decir, que podamos trabajar bien con ella, y el azúcar glas tamizado poco a poco. Lo batiremos muy bien con unas varillas eléctricas para que todo se integre.
Mezclamos el azúcar glas y la mantequilla.
Pelamos el plátano, le quitamos las hebras y lo cortamos en trozos para batirlo hasta que obtengamos una pasta líquida y sin ningún grumo ya que si lo hubiera obstruiría nuestra manga pastelera. Es entonces, cuando lo añadimos a la mezcla de azúcar glas y mantequilla anterior y seguimos batiendo todo con las varillas eléctricas.
Batimos el plátano.
La buttercream tiene que tener una textura cremosa, como de helado, que se pueda manejar bien pero que a la vez tenga consistencia; parecido a la que os enseño en esta foto.
Buttercream lista.
Cuando nuestros bizcochitos estén listos, deben tener una apariencia plana y no sobresalir mucho de la cápsulas en las que van metidos. Los dejaremos enfriar unos 5 minutos en el molde para luego pasarlos sobre una rejilla y dejar que se enfríen totalmente.
Sacamos los bizcochos del horno.
Dejamos que se enfríen sobre una rejilla.
Por último (y sólo cuando se hayan enfriado completamente) sólo nos queda ponerles la buttercream por encima. Le ponemos una primera capa con un cuchillito o espátula pequeña para cubrir imperfecciones y luego es cuando comenzamos a echarle la crema con la manga pastelera. Como soy aún nueva en esto de los cupcakes usé una manga pastelera de silicona que tengo en casa, y por eso no puedo deciros que boquilla usé. Pero para que os hagáis una idea era como de estrella estriada.
Ponemos una primera capa de buttercream para cubrir.
Usamos la manga pastelera para decorar.
Y con este último paso tendremos listos unos deliciosos cupcakes que volarán de la mesa como os descuidéis jajaja.
Espero que os haya gustado y que os animéis a hacerla. Están MUY buenos y la buttercream de plátano deliciosa.
Besos y os espero en la próxima receta que se nos avecina :)
Fuente: este post proviene de La que se avecina en mi cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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