Alcachofas.
Ajos.
Limones.
Aceite de oliva.
Sal marina
Elaboración
Limpiamos y cortamos las alcachofas hasta dejar solo el corazón, las lavamos y las frotamos con medio limón para que no se oxiden y se pongan oscuras, al mismo tiempo que mejoramos el sabor del plato y le añadimos un plus de vitamina C.
Salteamos las alcachofas en aceite de oliva a fuego lento, podemos comprobar si están listas pinchándolas con un palillo o la punta de un cuchillo.
Mientras sofreimos las alcachofas, pelamos los ajos y los cortamos en láminas.
Reservamos las alcachofas y en el aceite que queda en la sartén sofreimos las láminas de ajo, cuando el ajo esté ligeramente dorado volvemos a poner las alcachofas en la sartén, le añadimos sal y pimienta al gusto y lo cocinamos 2-3 minutos mas removiendo con una cuchara de madera.
Con esta receta las alcachofas quedan crujientes y “al dente”, pero si queréis que queden blanditas se pueden hervir las alcachofas en agua con el zumo de un limón y después de escurrirlas bien, saltearlas en el aceite con el ajo.
probarlas y ya me diréis que tal.
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