Benicàssim es una conocida localidad turística de la provincia de Castellón, famosa por el Festival de Música FIB que se celebra en verano. Además, es una ciudad con mucho encanto por sus maravillosas playas y sus Villas y por la calidad de su oferta gastronómica.
Miles de personas han llegado desde toda la provincia, diferentes puntos de España e incluso del extranjero, para disfrutar de una de las citas gastronómicas más populares y multitudinarias y que, además, cumple este año su 40º aniversario coincidiendo con la declaración de fiesta de interés turístico de la Comunitat.
A tope de gente
Grupos de amigos disfrutando del Día de las Paellas
La fiesta ha comenzado con la despertà por las calles de Benicàssim conducida por la colla Els Deus del Foc y recorre prácticamente toda la ciudad.
Después se ha celebrado el tradicional almuerzo solidario en la plaza de la Estación, patrocinado por el Ayuntamiento. Los vecinos empiezan el día metiéndose “entre pecho y espalda” un trozo de hogaza y un poco de embutido que han asado en grandes montones de brasas.
Barbacoa en el almuerzo solidario del Día de las Paellas en Benicássim (2018)
Hay música en cualquier rincón de la ciudad. Unos 22 conciertos de todo tipo de música (organizados por diferentes locales de Benicàssim), y con escenarios esparcidos por toda la ciudad, avivan el ritmo y el entusiasmo del público.
“Es una fiesta nacida dentro del seno de nuestras fiestas patronales, dentro de les festes de Sant Antoni, dentro de las fiestas del pueblo. Naciendo como un concurso entre vecinos al costat de la via y llegando al número de paellas de la actualidad”(Elena Llobell- Elena Llobell)
En su origen el Día de las Paellas fue un concurso de paellas y hoy se ha convertido es un gran festejo en la que vecinos cocinan sus paellas para comérselas junto a sus familiares o amigos. Únicamente hay que apuntarse y el Ayuntamiento te asigna un sitio. El Día de las Paellas, el Ayuntamiento deja en la calle un montón de arena para cada una de las paellas y un saco de leña. También facilita los hierros o trébedes.
El ambiente es increíble y también es un buen día para los hosteleros ya que, a pesar de que muchos comen su paella hecha en la calle, hay muchos visitantes que comen en alguno de los muchos restaurantes de Benicàssim.
Paella del restaurante Jota´s La Pau en el Día de las Paellas en Benicássim (2018)
Una advertencia: si visitáis Benicássim este día vuestra ropa olerá a humo sin remedio. ¡Poneos ropa vieja y disfrutad del Día de las Paellas!