Hoy viernes os traigo el postre, un postre de los de limón de toda la vida, que para los amantes de los postres de limón, como yo, es una receta de diez. La receta la encontré como una receta chilena, aunque la verdad es que se trata de una riquísima mousse de limón. Ya hace mucho tiempo os dejaba la receta de la mousse de limón elaborada con leche evaporada, que se convirtió en una de las recetas más vista de este blog. Pues bien, en esta ocasión también lleva leche evaporada, y además leche condensada, por lo que este postre es más calórico que el anterior, pero realmente sale tan bueno, que merece la pena. En la receta original se acompañaba de bizcochos de soletillas, pero yo le he puestos unos arándanos y unas hojas de hierbabuena para hacerlo más ligero.
INGREDIENTES:
300 gr. leche evaporada
397 gr. de leche condensada (un bote pequeño)
200 ml. de zumo de limón
7 gr. de levadura en polvo
Para decorar:
Arándanos
Unas hojas de hierbabuena
Unas rodajitas de limón
PREPARACIÓN:La leche condensada y la leche evaporada tienen que estar muy frías por lo que es conveniente tenerlas refrigeradas por lo menos 24 horas antes. Separamos un poco de zumo de limón y le añadimos la gelatina en polvo, reservamos. Montamos con unas varillas eléctricas la leche evaporada y cuando empiece a tomar cuerpo y a engordar iremos añadiendo la leche condensada poco a poco. También añadimos el zumo de limón y seguimos batiendo hasta que se integre totalmente todo.
Vertemos un poco de agua muy caliente en el zumo de limón que tenemos reservado junto con la gelatina, para hidratar ésta. Vertemos la mezcla en la mousse e integramos todo con una espátula. Vertemos la mezcla en vasos, copas o en un envase más grande, si queréis hacerlo en gran formato. Llevamos al frigorífico durante unas horas o de un día para otro. A la hora de servir decoramos con los arándanos, hojas de hierbabuena y una rodajita de limón y servimos.
Ya habéis visto lo facilito que es, y otra opción más que buena para las fechas veraniegas que se aproximan.
Feliz fin de semana.
Fuente: este post proviene de Atrapada en mi cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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