Una de las recetas orientales que más me gusta (a parte del hummus claro) es el falafel. Como no, con el mismo ingrediente.
Me flipa el sabor de tal combinación de especias y hierbas, lo crujiente y denso que es y lo bueno y suave que queda con la salsa.
Yo lo he hecho al horno porque frito absorbe mucho aceite y no me apetecía tan pesado y la verdad es que ha quedado genial, queda menos compacto pero mismo sabor y textura.
Un buen falafel con su salsita, un wrap o pan de pita y un poco de lechuga y ¡cena arreglada!
Ingredientes:
2 taza de garbanzos
1 diente de ajo
1/2 cebolla pequeña
1 taza de perejil fresco sin tallos
1/2 taza de cilantro fresco sin tallos
1 cda. rasa de comino en polvo
1 cdita. de bicarbonato
2 cdas. de harina de trigo
Sal y pimienta
Salsa de yogur:
1 yogur natural (puede ser de soja)
1 diente de ajo
1 puñado de cilantro fresco sin tallos
Zumo de medio limón
1 cda. de AOVE
Pizca de sal
Preparación:
Precalentamos el horno a 190ºC.
Trituramos todos los ingredientes y hacemos croquetas planas (una bola primero y luego la chafamos). Los vamos colocando sobre papel sulfurizado en la bandeja del horno.
Los horneamos en la parte de arriba del horno unos 10 minutos. Ponemos el grill y le damos 5 minutos por cada lado para que se tuesten. Al girarlos ir con cuidado porque se desarman con facilidad, con una espátula y un poco de cariño es suficiente (Al sacarlos del horno quedan más sólidos).
*Si los queréis fritos, no hay más que calentar aceite y vuelta y vuelta...
Dejar que se enfríen 2 minutos fuera del horno y ya se habrán compactado (si los cogéis antes con prisas es posible que se os rompan... paciencia!).
Para la salsa basta con triturar todos los ingredientes y servirla con los falafels!
Si además tenéis tortillas de harina o fajitas lo vais a bordar: un poco de lechuga, los falafels y la salsa de yogur y te sientes en Pakistán...
Espero que os gusta, bijus!