Hola, como cada día 15, viajamos virtualmente con el Reto Reposteras por Europa, que organiza Isa del blog Gotas de azúcar y vainilla, por los distintos países del continente para conocer sus postres. Esta vez Bea de Sweet cookies by Bea, eligió Ciudad del Vaticano como destino y como no conocía nada de su gastronomía recurrí una vez más, a mi amigo Google y descubrí que Eva Celada escribió un libro que se llama "Los secretos de la cocina del Vaticano" donde revela las preferencias gastronómicas de los distintos Papas que han pasado por la Santa Sede, así llegué a este flan de calabaza y naranja del gusto de Juan XXIII que es riquísimo y muy fácil de preparar.
Ciudad del Vaticano es un país soberano, sin salida al mar y que se encuentra en el centro de Roma, capital de Italia por lo que su comida es típicamente italiana, pero incluye platos favoritos de muchos de los papas.
Según la escritora al papa Juan XXIII le gustaba la buena mesa y la cocina tradicional como los guisos y los platos de cuchara, pero también tenía debilidad por el pan, los embutidos, las tartas, los helados y los flanes como éste de calabaza y naranja.
Ingredientes para la calabaza confitada:
50 gr de agua
50 gr de azúcar
100 gr de calabaza en cubos
Elaboración:
Ponemos en una cacerola pequeña el agua y el azúcar, removemos bien y añadimos la calabaza pelada y cortada en cubos. Cocinamos a fuego medio durante 12 minutos, removiendo de vez en cuando. Retiramos del fuego y reservamos.
Ingredientes para 5 flanes individuales:
250 gr de leche
2 trozos de cáscara de naranja
1/2 cucharadita de canela molida
50 gr de azúcar común
2 huevos grandes
caramelo para las flaneras
calabaza confitada
Elaboración:
Ponemos a calentar en una cacerola la leche, la cáscara de naranja, la canela molida y el azúcar. Cuando rompa el hervor apagamos y dejamos enfriar.
Ponemos los huevos en un bol y los batimos, agregamos la leche que pasamos por un colador para eliminar la cáscara de naranja e incorporamos la calabaza cocida.
Precalentamos el horno a 180º.
Ponemos caramelo en el fondo y los laterales de unas flaneras y volcamos allí la mezcla.
Metemos las flaneras dentro de una fuente para horno a la que le agregamos un poco de agua y cocinamos a baño María, en horno a 180º durante 30 minutos.
En la receta original lo cocinan durante 25 minutos, pero en mi horno tardó 5 minutos más, ya saben que cada horno es de su padre y de su madre, y se comporta como quiere...
Con esta cantidad de ingredientes salen 5 unidades.
Adoro hacer los postres en porciones individuales porque es práctico, porque se ve más bonita la presentación y porque puedo comer con menos culpa, ja, ja, ja...
Es un postre ideal para preparar para estas fiestas ya que podemos prepararlo el día anterior y conservarlo hasta el momento de servirlo.
Se acompaña con mermelada de naranja pero en casa no nos gusta, así que ese paso lo obvié y queda igualmente delicioso.
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¡Hasta la próxima!
¡Sean felices!
Fuente: este post proviene de Mi mundo Pinkcake, donde puedes consultar el contenido original.
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