Aprovechando que ahora hay fresas por todos lados y además bastante buen precio, he decidido sacar esta receta del cajón y hacer esta tarta, que sólo por lo bonita que queda ya dan ganas de comérsela toda de una vez...la verdad es que en casa duró un suspiro de lo rica que estaba.
Pues aunque parezca complicada de hacer es fácil fácil, la masa es muy simple y luego sólo hay que añadirle la fruta que queramos por encima.Yo le he puesto fresas y kiwis pero se puede hacer con la fruta que más os guste, manzana, pera...y seguro que también queda deliciosa.
Ingredientes
150g de harina
2 cucharadas soperas de azúcar
75g de mantequilla fría
1/2 cucharadita de sal
3 cucharadas soperas de agua fría
250g de fresas
2 kiwis
azucar para endulzar las fresas
Elaboración
Mezclamos la harina , el azúcar y la sal, a continuación añadimos la mantequilla cortada en cubos recién sacada de la nevera,amasamos ligeramente, nos quedará una pasta arenosa.Ahora incorporamos el agua fría hasta formar una bola de masa.Reservamos en el frigorífico envuelta en papel film al menos una hora.
Cortamos las fresas en cubitos y las dejamos endulzar cubiertas de azúcar.
Una vez pasado el tiempo de reposo estiramos la masa para que tome forma redonda dejándola finita, cubrimos con avena dejando al menos dos dedos libres del borde para luego doblar la masa.La avena la ponemos para que absorba el exceso de líquido de las fresas y nos quede una masa crujiente.Encima de la avena colocamos las fresas.Doblamos hacia adentro el borde de la masa que habíamos dejado libre y pintamos con huevo batido para darle brillo.
Introducimos en el horno precalentado a 200º durante unos 25 minutos o hasta que veamos que la masa empieza a tomar color.
Si queremos añadir kiwis será una vez sacada la galette del horno ya que si no pierden su color verde y se ponen marrones.
Espolvoreamos con azúcar glass para que quede más bonita.