Ingredientes (para 10-15 unidades):
Para la masa:
180 g de harina
20 g de cacao (amargo)
100 g de mantequilla
50 g de azúcar
1 huevo pequeño
1-2 cucharas de leche fría
Para el relleno (caramelo de chocolate):
120 ml de nata (crema de leche) líquida (crema de leche) 15%
50 g de azúcar
1 cuchara llena de cacao (amargo)
25 g de mantequilla
Preparamos la harina con el cacao, el azúcar y la mantequilla fría. Ponemos todos los ingredientes encima de la superficie de trabajo y los cortamos con un cuchillo lo más finamente posible.
Después hacemos una especie de volcán y ponemos en el “crater” el huevo y la leche.
Trabajamos la masa con las manos hasta formar una bola suave y elástica.
Estiramos la masa con un rodillo hasta un espesor de 2 mm aproximadamente. Con un molde de galletas o pastas cortamos círculos o cuadrados (yo he hecho de los dos). En la mitad de los círculos (o cuadrados) hacemos un pequeño corte en el medio con otro molde (puede ser de corazón o de otras formas). De esta manera tendremos los fondos y las tapas de las galletas. Horneamos alrededor de 10 minutos a 200ºC. Vigilad las galletas porque se pueden quemar en un plis plas!
Una vez horneadas, enfriamos las galletas encima de una rejilla y a continuación preparamos el caramelo. Es muy fácil, solo tenemos que juntar todos los ingredientes en un cazo y cocerlos durante unos 10 minutos.
Veréis que la mezcla hervirá y hará burbujas, tendrá que reducir un poco y espesar. De vez en cuando conviene quitarlo del fuego y comprobar con una cuchara lo espesa que es.
Al final la masa habrá reducido a la mitad más o menos y parecerá chocolate caliente.
Retiramos del fuego y mientras está caliente, untamos con una brocha sobre las bases de las galletas. Enseguida ponemos encima la tapa con el agujerito en medio y ya está! Cuando se endurezca el caramelo, la galleta estará lista para ser comida :)
Disfrutadlas y compartidlas! ;)