Buenas de nuevo, chicos.
Os traigo ahora una de mis pocas experiencias con helados caseros.
El caso es que hay un concurso en canal cocina de helados caseros en el que me gustaría participar. No es por ganar o no ganar que me apunto a esas cosas, aunque ganar te alegre bastante :) . Es que me hacen plantearme ideas que quizá de otro modo no lo haría.
Una de ellas son los helados caseros. He hecho algunas veces, pero con sabores muy básicos. Pero el ver que se hacía un concurso me picó: quería probarlo, y hacer alguna cosa lejana a cualquiera que hubiera hecho hasta ahora.
Así que me decidí por utilizar la pasta de rosas de Home Chef que compré hace poco para utilizar en otros fines, pero que, mira por dónde, fue a parar a este helado.
Bueno, si os animáis, aquí os dejo los ingredientes para unas 4 ó 5 raciones.
Ingredientes:
- 200 gr de queso quark
- 200 ml de nata (crema de leche) para montar
- 200 gr de leche
- 40 gr de azúcar invertido
- 30 gr de pasta de rosas
- 150 gr de bizcocho de limón
Del bizcocho (usaremos 1 vasito de yogur de medida)
- 1 vasito de queso quark o yogur natural
- 1 vasito de aceite de girasol
- 3 huevos
- 2 vasitos de azúcar
- 3 vasitos de harina
- la ralladura de 1 limón
- 1 cucharada de zumo de limón
Del azúcar invertido (receta del blog paraestarporcasa)
- 150 ml de agua mineral
- 350 gr. de azúcar
- 1 pareja de sobres de gasificante para repostería, que contienen:
· 2,2 gr. de acidulantes (ácido málico y ácido tartárico)
· 3,3 gr. de bicarbonato sódico
Preparación:
Bizcocho de limón
Es lo primero que prepararemos. Es el típico bizcocho de yogur que aprendíamos en el cole, con las medidas del vasito.
Todo tan fácil como batir los huevos con el azúcar, añadir el resto de ingredientes y mezclar bien.
Precalentar el horno a 180º C. Engrasar un molde desmontable, verter en él la mezcla y llevarlo al horno caliente durante 30 ó 35 minutos, hasta que al pincharlo con un palillo, éste salga limpio.
Guardaremos el bizcocho para la merienda o lo que más nos guste, que está la mar de rico. Pero nos reservaremos 150 gr aproximadamente para añadir al helado.
Azúcar invertido
Ponemos en un cazo el agua, el azúcar y el sobre blanco, el acidulante, de la pareja de sobres de gasificante para repostería. Removemos hasta que el azúcar y el acidulante se hayan disuelto totalmente y el agua empiece a hervir.
Ahora apagaremos el fuego y dejaremos reposar un rato, hasta que pierda la temperatura. Entonces le añadimos el sobre morado, que es el bicarbonato, y removemos. Se formará una espuma por encima, pero desaparecerá.
Una vez frío lo podemos conservar en un tarro en la nevera.
Helado
La mezcla es muy sencilla.
En un bol batimos el quark, la nata (crema de leche) para montar y la leche. Le añadimos la pasta de rosas y el azúcar invertido y lo batimos bien.
Lo llevamos a la nevera durante un par de horas.
Yo lo he preparado con heladera, para lo que he tenido el recipiente refrigerante en el congelador un mínimo de 8 horas.
Preparamos la heladera y vertemos poco a poco la mezcla en ella. Cuando empiece a tener buena consistencia, más o menos a los 15 minutos, le añadimos poco a poco el bizcocho desmenuzado, a trocitos pequeños pero no muy pequeños.
Dejamos cuajar el helado unos 5 minutos más, tras lo cual podremos ya servirlo o poner el helado en un recipiente hermético y llevarlo al congelador. En este último caso, lo sacaremos unos 5 minutos antes de servir.
Espero que os guste. Queda cremoso pero con pequeños tropezones de bizcocho que le dan un sabor muy bueno. Y creo que el contraste entre el ácido del quark y el limón y el aromático sabor de las rosas queda muy bien.
Ya me diréis si lo probáis.
¡Que aproveche!